La joven asesinada y descuartizada en Vinaròs advirtió a su madre de que su pareja la mataría

El acusado de matar y descuartizar a su pareja en Vinaròs se ha negado este lunes a declarar en el juicio con jurado que ha comenzado en la Audiencia de Castellón en una sesión en la que la madre de la víctima ha relatado el miedo que tenía su hija, quien tres días antes de desaparecer le dijo: "Mi muerte vendrá de manos" del procesado.

    El juicio ha empezado en la Sección Segunda de la Audiencia con la primera de las tres jornadas en las que está señalado y en la que debía comenzar a prestar declaración el acusado.

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    El Ministerio Fiscal y la acusación particular solicitan para él una pena de 25 años de prisión por un delito de asesinato con la agravante de parentesco, ya que sostienen que el acusado -que tenía 22 años cuando ocurrieron los hechos- mató a su novia en la madrugada del 17 de febrero de 2019, después de que ambos hubieran cenado con unos amigos y hubieran acudido a una discoteca de Vinaròs, donde residían.

    Después, sostienen, la mató a golpes y días después descuartizó su cadáver y lo enterró en una finca de Ulldecona (Tarragona) adonde lo transportó en bolsas de basura.

    Al inicio del juicio el acusado ha pedido la suspensión del mismo pues ha indicado que quería cambiar de abogado y que se le otorgara uno de oficio por discrepancias con su actual letrado, pero el magistrado le ha indicado que debía haber formulado esa petición con anterioridad -ya que solo la expresó el pasado viernes por carta- y ha tildado la actitud del procesado de "maniobra dilatoria", por lo que ha ordenado continuar con la sesión.

    El acusado se ha negado a declarar y ha comenzado la declaración de los testigos; en primer lugar ha entrado en la sala la madre del acusado, que también se ha acogido a su derecho a no declarar -por tratarse de un familiar directo- y seguidamente el padrastro del mismo. Ambos fueron detenidos en los días siguientes a la detención del procesado al considerarles en un principio cómplices, aunque posteriormente fue retirada la acusación.

    El padrastro ha reconocido que su mujer y él fueron a por el acusado a Vinaròs el día 17, después de este llamara a su madre por teléfono "muchas veces", aunque no ha precisado por qué tenían que recogerle. El testigo ha señalado que "no sabía nada" de lo ocurrido, ni "cooperó" en los hechos.

    Durante la sesión ha declarado por videoconferencia desde Moldavia la madre de la víctima, que ha explicado que hablaba a diario con su hija y que notaba que tenía "miedo" y estaba muy delgada, por lo que le preocupaba mucho. Asimismo ha explicado que la víctima -que tenía 26 años cuando fue asesinada- le dijo: "Mi muerte vendrá de manos" de su pareja, solo tres días antes de que desapareciera.

    La madre ha explicado que estuvo durante dos semanas hablando con el procesado y que éste le dijo que la joven se había marchado a Alemania -donde residía antes de trasladarse a España-, un extremo que ha sido corroborado por numerosos testigos, tanto amigos y familiares de la víctima como del procesado, a quienes ofrecía la misma versión cuando preguntaban por ella.

    Una de las amigas de la víctima ha explicado que ella fue testigo de una agresión por parte del procesado a la víctima, quien también le contó -del mismo modo que ha indicado otra testigo- que la había "secuestrado y encerrado" durante varios días en una vivienda que tenía el procesado en Sant Jordi y que también le quemó una maleta con ropa, del mismo modo que vio a su amiga marcas y moratones en el cuerpo. También ha explicado que su amiga le contó que ella quería volver a Alemania pero el procesado "no la dejaba".

    Una amiga de la pareja ha explicado que tanto ella como su novio insistieron mucho en que el procesado denunciara la desaparición, y que fue finalmente cuando le dijeron que ellos iban a denunciarla cuando él fue con ellos a poner la denuncia. Sin embargo, ha dicho la joven, "mintió en el relato de los hechos" que expuso ante los agentes de la Guardia Civil.

    El abogado de la defensa, que ha pedido la libre absolución de su representado, ha explicado que su cliente "encontró ya sin vida el cuerpo de la joven en su casa" cuando volvió de la discoteca, y que "por un miedo insuperable" se deshizo del cadáver.