“Este es el reto: tengo que desatarme antes de un minuto. Si no, me afeitarán una ceja”. El hombre aparece maniatado en un vídeo colgado en su canal de Youtube con un dibujo a rotulador en su frente. Rápidamente se desata y sonríe a la cámara. Prueba superada. Este vecino de Palma, de 36 años y con una discapacidad intelectual de un 38% aparece en numerosos vídeos similares colgados en la red, en los que propone un desafío y asume un castigo si no lo logra. El pasado fin de semana convocó una especie de concurso en una red social: Cambia mi look o destrózalo. En él ofrecía premios y animaba a acudir a tatuadores. Durante dos días presuntamente fue sometido a vejaciones y torturas por un grupo de siete jóvenes en un piso de ManacorLe ataron con bridas, le pegaron los labios con pegamento, le tatuaron tres penes en la cara y un sujetador en el pecho, le afeitaron las cejas y se las tatuaron, y le clavaron chinchetas. La Policía Nacional ha detenido a cuatro mujeres y tres hombres, de entre 20 y 30 años por retención ilegal, lesiones y vejaciones.

La víctima tiene un canal en Youtube, en el que suele mostrar una serie de juegos que propone a desconocidos en la calle. En algunos de ellos, cuando no logra el objetivo marcado, acepta una penalización, como que le pinten la cara con rotulador. Para el pasado fin de semana había organizado una especie de concurso: Cambia mi look o destrózalo. En las redes sociales ofrecía premios de 500 a 3.000 euros a quien le propusiera pruebas. "Necesitamos tatuadores y tatuadoras", reclamaba.

Vejaciones y torturas

El pasado viernes quedó con un grupo de siete jóvenes en la Plaza de España de Palma, y se marchó con ellos a Manacor. Durante el trayecto le vistieron de mujer, y le hicieron entrar a comprar en un supermercado. Posteriormente fueron al piso de una de las chicas y allí, durante dos días, fue sometido a toda clase de vejaciones y torturas, que habrían sido grabadas para colgarlas en internet.

Fuentes cercanas a la víctima afirman que el hombre había puesto como condición previa que no hubiera ningún acto violento. Cuando le clavaron chinchetas trató de marcharse, pero presuntamente le retuvieron a la fuerza y le ataron con bridas. A lo largo de las horas siguientes le pegaron los labios con un pegamento ultrafuerte, le tatuaron tres penes en la frente y los pómulos, así como unos pechos y un sujetador alrededor del torso. También le afeitaron las cejas y se las tatuaron, y le cosieron los dedos de los pies con aguja e hilo. 

Estas prácticas se habrían prolongado durante dos días. El domingo por la tarde le permitieron salir para que fuera a un cajero a sacar dinero para pagarles. El grupo se quedó con su teléfono móvil. El hombre logró pedir ayuda y relató lo que había ocurrido. A través de la localización del móvil la Policía pudo encontrar el piso en el que había estado retenido y empezaron los arrestos. A lo largo del domingo y el lunes fueron detenidos siete jóvenes -cuatro mujeres y tres hombres- de entre 20 y 30 años de edad.

La Policía Nacional prosigue las investigaciones y no se descartaba que hubiera nuevos arrestos en las próximas horas. Los detenidos mantienen que cometieron todos los actos por encargo de la víctima, aunque este argumento será difícil de sostener si se confirma que padece una elevada discapacidad intelectual.

El hombre fue trasladado a un centro médico, donde se le atendió de las lesiones que sufría. De acuerdo con las primeras investigaciones, no habría sufrido agresiones sexual. Los siete detenidos están acusados de los delitos de retención ilegal, vejaciones y lesiones.