Agentes de la Policía Nacional han detenido en Sagunt a un hombre de 30 años de origen español como presunto autor de un delito de malos tratos en el ámbito familiar y resistencia y desobediencia a agente de la autoridad, tras al parecer agredir a su pareja con un arma blanca y amenazar a los agentes, además de propinarles patadas y cabezazos. La víctima pudo pedir ayuda desde una ventana a los viandantes que avisaron la Policía, según han indicado fuentes policiales.

Los hechos ocurrieron el viernes, sobre las seis de la tarde, cuando la Sala 091 alertó a los agentes para que acudiesen a un domicilio de Sagunt, donde al parecer se encontraba una mujer pidiendo socorro a gritos desde una ventana.

Inmediatamente, los agentes se dirigieron a la zona y allí vieron a una mujer que pedía auxilio desde su balcón. Rápidamente los policías accedieron al edificio y siguieron las voces, que los condujeron hasta la puerta de la vivienda. Fue en ese momento cuando la víctima se dirigió a los policías y manifestó que su pareja no le dejaba abrir la puerta.

No obstante, la mujer consiguió zafarse del presunto agresor y, siguiendo las indicaciones de los agentes, se encerró en una habitación para evitar ser agredida. Momentos después, los policías, con la ayuda de una dotación de bomberos, accedieron a la vivienda, donde fueron recibidos por un hombre que portaba en su mano derecha un puñal a la vez que les amenazaba.

A patadas y cabezados con los policías

Aunque en reiteradas ocasiones los policías le conminaron para que dejase el arma blanca en el suelo, el varón hizo caso omiso a sus indicaciones, por lo que se inició un forcejeo en el que finalmente los policías consiguieron reducirlo, aunque recibieron patadas y cabezazos mientras el sospechoso esgrimía el puñal.

Después de estos hechos, los agentes comprobaron que la víctima, inmersa en un importante estado de nerviosismo, presentaba moratones y golpes en las extremidades superiores, además de una herida sangrante en el antebrazo y varios moratones en ambos brazos. Asimismo, a causa de los golpes del hombre, se quejaba de dolores en el interior de la boca y en las costillas.

Durante las pesquisas policiales, los agentes averiguaron que la agresión se inició tras un forcejeo durante una discusión. La víctima quiso abandonar el domicilio pero el hombre se lo impidió. Para evitar que la mujer se marchara, cogió un puñal y comenzó un forcejeo con ella, momento en que la víctima recibió un corte en el brazo derecho.

Por todo lo sucedido el hombre fue detenido como presunto autor de un delito de malos tratos en el ámbito familiar y resistencia y desobediencia a agente de la autoridad. El arrestado, que cuenta con antecedentes policiales, ha pasado a disposición judicial.