La rápida intervención de la Policía Nacional de Alicante tras una llamada por un grave episodio de violencia machista le salvó la vida a una mujer de 33 años que fue encontrada inconsciente y colgada con una cortina enrollada en el cuello en una vivienda del barrio Virgen del Remedio. Su pareja, un hombre de 50 años con más de cien detenciones en su historial y con el que mantenía una relación sentimental desde hace varias semanas, fue detenido como presunto autor de la agresión y alegó ante la Policía que fue su pareja quien intentó ahorcarse con la cortina.
La víctima pudo ser reanimada por los policías que la rescataron y por los sanitarios desplazados al lugar. Fue evacuada en estado grave y quedó ingresada en la UCI del Hospital General de Alicante, donde permanece estable.
Los investigadores de la Unidad de atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Comisaría Provincial de Alicante realizan sus averiguaciones para esclarecer las circunstancias en que se produjo el suceso, aunque las primeras pesquisas apuntan a una agresión machista cuyo trágico final fue evitado «in extremis» por la Policía Nacional. Vecinos del inmueble aseguraron a este diario que la pareja había protagonizado algún incidente anterior.
El detenido fue trasladado ayer por la mañana por la Policía hasta el domicilio con el fin de realizar una inspección de la vivienda y tratar de reconstruir lo sucedido. Aparentemente, el arrestado no parecía encontrarse en perfecto estado de salud, como si estuviera afectado por la ingestión de pastillas o alguna sustancia.
El suceso ocurrió poco después de las cuatro de la madrugada. La sala del 091 recibió un aviso de que se estaba produciendo una agresión a una mujer por parte de su pareja en el domicilio que ambos compartían en la calle Farmacéutico Agatángelo Soler de Alicante. «Esta vez me va a matar», manifestó la mujer en la llamada que realizó para pedir ayuda y denunciar la agresión que estaba sufriendo por parte de su pareja.
Enrollada al cuello
Al lugar se desplazaron tres patrullas de la policía y tras irrumpir en un domicilio de la segunda planta encontraron a una mujer en ropa interior que estaba colgada de una cortina enrollada al cuello y con nudos.
Estaba inconsciente y sin respiración, pero tenía el pulso muy débil, por lo que los agentes la descolgaron de inmediato ante la pasividad de su compañero sentimental. Ante la llamada realizada por la víctima antes de quedar inconsciente, las contradicciones de su pareja, así como indicios observados en el domicilio, la Policía detuvo al hombre, de 50 años que suma ya 118 arrestos por delitos contra el patrimonio y contra las personas.
