Barbara G. J., la mujer de 33 años detenida en la madrugada del martes tras la caída de su novio desde un quinto piso en València ha sido puesta en libertad con cargos esta tarde. Agentes del grupo de Homicidios han informado a la investigada de que continúa acusada de un presunto delito de omisión del deber de socorro por no haber prestado auxilio ni haber llamado a Emergencias pese a que bajó a la calle y lo vio tendido e inconsciente.

Tal como informó ayer Levante-EMV Jonatan Plana cayó desde el balcón del quinto piso del número 16 de la calle Lladró i Mallí de València, en el barrio de Patraix, durante una fortísima discusión entre Barbara, una amiga suya que también estaba en la vivienda y el joven.

Una vecina, que fue quien alertó al 112 al escuchar el impacto de la caída de Jonatan, vio a Barbara bajar minutos después a la calle, acercarse al cuerpo inerte de su novio y regresar deprisa de nuevo al portal, tras decir en voz alta: «Se ha caído sin querer».

La investigada deberá comparecer ante el juzgado que asuma el caso cuando el magistrado la cite para tomarle declaración. La decisión de la Policía implica que, de momento, no han encontrado evidencias de que la mujer empujase a Jonatan o interviniese directamente en la caída.

Por esa razón, únicamente está acusada de omisión del deber de socorro y no de homicidio, como ocurriría en el caso de que la Policía Nacional hubiese encontrado pruebas de una muerte violenta de etiología homicida.

El joven ha fallecido esta tarde

Mientras eso sucedía, los médicos desconectaban a Jonatan en el hospital La Fe, después de que las últimas pruebas neurológicas que quedaban pendientes certificasen que no había actividad cerebral alguna.

La familia del joven ya ha dado su consentimiento para que sus órganos puedan ser donados, aunque los médicos están pendientes de la autorización judicial, ya que al ser un caso bajo investigación es preciso realizar la autopsia. Está previsto que el examen forense se practique en las próximas horas.