Un varón de 72 años fue detenido este lunes en Vigo por efectivos policiales tras apuñalar a su hija en su domicilio de la calle Beiramar. Los hechos tuvieron lugar a las 16.15 horas de la tarde. Una patrulla de la Policía Local que discurría por el entorno observó a una mujer de 37 años en bata y pijama que sangraba abundantemente por un costado izquierdo y pedía ayuda. Se encontraba acompañada por otras dos mujeres que también trataban de ayudarla. En su auxilio, ya vieron la agresión realizada con un arma blanca, pero en un primer momento la víctima no atinaba a explicar qué le había pasado. Una vez superada la desorientación, consiguió decir que había sido apuñalada por su padre.

Una vecina que conocía al padre y a la hija se ofreció a acompañar a los agentes hasta el domicilio del supuesto agresor para su detención. La vecina tocó el timbre y cuando el varón abrió la puerta los policías accedieron al interior y corroboraron que en la estancia todavía quedaba rastro de la pelea. El padre reconoció lo hechos: "Esto tenía que pasar, yo le clavé el cuchillo". El progenitor describió la escena previa que había llevado al apuñalamiento, alegando que su hija estaba fuera de sí rompiendo cosas en el piso y que más tarde irrumpió en su dormitorio para exigirle dinero. En ese momento comenzó una discusión que se trasladó al salón, donde le clavó el cuchillo. En el fregadero de la cocina los agentes encontraron el cuchillo manchado de sangre y con la punta doblada.

La intervención terminó con la detención del hombre y con el traslado de su hija en estado grave al hospital Álvaro Cunqueiro. Hasta el punto también se trasladó la Policía Científica y la Unidad de Homicidios de la Policía Nacional, así como agentes de la UFAM.