Agentes de la Policía Nacional han detenido ayer en València a un joven 19 años de ideología neonazi como presunto autor de tres delitos de lesiones y otro de odio, tras agredir a tres personas, a una de ellas por vestir una sudadera con la leyenda "Working Class" (Clase obrera)

La investigación se inició al tener conocimiento los policías de los hechos ocurridos en la tarde del día siete, en las inmediaciones de la plaza Xúquer de València, cuando un joven fue agredido por un grupo de unas diez personas, al parecer por portar una sudadera con una inscripción que los presuntos autores identificaron como perteneciente al colectivo de ideología antagonista.

Como consecuencia de las investigaciones, los policías averiguaron que el ahora detenido sería el presunto autor de dos agresiones cometidas la tarde anterior de su arresto, en dos puntos diferentes y dos horas distintas, en las proximidades del hospital Arnau de Vilanova, donde una persona resultó con heridas graves de diversa consideración que precisó su ingreso en un centro hospitalario.

Según se desprenden de las investigaciones este grupo de diez personas previamente habría estado en las inmediaciones del estadio de Mestalla, donde se celebró el partido de fútbol entre el Valencia C.F. y el Atlético de Madrid.

Se continúan las investigaciones para el total esclarecimiento de los hechos.

El detenido ha pasado en la mañana de hoy a disposición judicial.

Un grupo de neonazis agredieron al joven por una sudadera

Un joven de 22 años ha denunciado que anoche fue apaleado por 10 personas de estética neonazi delante de su pareja por llevar el lema "Working class" (clase obrera) en su camiseta. Los hechos ocurrieron a las siete de la tarde en las inmediaciones de la Plaça del Xuquer de València, donde la víctima, según denuncia, se acercaba a una papelera cuando una persona encapuchada y con la cara tapada hasta los ojos le preguntó "qué me llevas" en referencia a la camiseta.

En ese momento vio que la persona llevaba un objeto cortante y el agresor le mandó al suelo de un puñetazo. Acto seguido comprobó como otras 9 personas también encapuchadas se unían al agresor para perseguirle hasta un portal, donde emprendieron con el a patadas, puñetazos y golpes en la cabeza. La víctima denuncia que le lanzaron varios objetos en la cabeza y que "vi como uno de ellos cogía una silla y me la partía encima". Según declara el agredido, varias de esas personas llevaban en la ropa simbología neonazi y fascista como una cruz de hierro o una cruz de laurel. Durante la agresión, varios de ellos empezaron a gritarle "esto es el reino de València". Finalmente la víctima logró zafarse de los agresores metiéndose a la cocina de un bar cercano.