La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal y ha detenido a siete personas por los delitos de pertenencia a grupo criminal, dos delitos contra la salud pública blanqueo de capitales, robo con violencia, defraudación de fluido eléctrico, receptación y hurto de vehículo a motor.

La operación 'Tupperfish' comenzó a principios de octubre de 2021, cuando los agentes detectaron la existencia de un punto de venta de marihuana sintética en València, según han informado fuentes de la Guardia Civil.

Esta sustancia, muy lesiva para el cuerpo humano, provoca efectos similares al cannabis pero más potentes, y se le conoce también como "pescao" o "hardcore" por su olor y graves efectos.

Según el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA por sus siglas en inglés), los cannabinoides sintéticos representan actualmente el mayor grupo de sustancias objeto de seguimiento a través del Sistema de Alerta Temprana de la UE.

La investigación realizada en la provincia de Valencia permitió detectar otros tres puntos de venta, uno de ellos en Mislata, otro en la capital valenciana y otro en Llíria, y logró localizar un chalet en el término municipal de Llíria dedicado al cultivo de marihuana.

También se realizaron 4 registros, 2 de ellos en València, uno en Xirivella y otro en Llíria, en los cuales se incautaron más de 4’5 kilogramos de marihuana, algo más de un kilogramo de hachís, 80 gramos de marihuana sintética, una pistola simulada, un machete, útiles para el cultivo de marihuana por valor de 14.000 euros y un vehículo turismo.

Los agentes determinaron que los detenidos sustraían, recurrentemente con violencia e intimidación, los terminales móviles y otros bienes de sus clientes para posteriormente venderlos. Igualmente ordenaban a algunos de sus compradores la distribución de las sustancias en sus zonas de residencia.

La operación concluyó con la detención de siete personas (dos de ellas mujeres), de entre 18 y 50 años, cuatro de ellas de nacionalidad española, una colombiana, una ecuatoriana y una brasileña. Cinco fueron detenidas en València, Xirivella y Paiporta y dos de ellas en Llíria.

Se les atribuyen delitos de pertenencia a grupo criminal, dos delitos contra la salud pública (tráfico de drogas, cultivo de marihuana) blanqueo de capitales, robo con violencia, defraudación de fluido eléctrico, receptación y hurto de vehículo a motor.

Las diligencias fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción número 9 de Valencia.