Tribunales
La Fiscalía pide cinco años de cárcel para los 22 migrantes del avión patera de Palma
La acusación señala que causaron una "situación sin precedentes" y opta por imputarles la sedición de la Ley de Navegación Aérea
La Fiscalía solicita sendas condenas de cinco años de cárcel para cada uno de los 22 migrantes acusados por el avión patera de Son Sant Joan, que aterrizó en noviembre de 2021 tras una falsa emergencia médica. El ministerio público opta por imputarles el delito de sedición previsto en la Ley de Navegación Aérea de 1964. La Fiscalía destaca que los procesados causaron una "situación sin precedentes en el espacio aéreo europea" y que se trató de una acción totalmente planificada con semanas de antelación. El juicio se celebrará en los próximos meses en la Audiencia Provincial de Palma. Los encausados permanecen en prisión provisional desde que fueron arrestados, la mayoría el mismo día del incidente y el resto en las semanas siguientes, aunque tres siguen en paradero desconocido.
El escrito de acusación de la Fiscalía, adelantado por ElDiario.es, relata que la entrada irregular de los migrantes en España, a través del aeropuerto de Palma, fue planeada en un grupo de Facebook formado por jóvenes marroquíes. Siguiendo este plan, embarcaron en un vuelo de la compañía Air Arabia que cubría la ruta entre Marruecos y Turquía el 5 de noviembre de 2021. En pleno vuelo, uno de los implicados simuló sufrir un grave problema diabético. Un supuesto médico que viajaba a bordo y que, como refleja la Fiscalía no llegó a acreditarse como tal, aseguró a la tripulación que su estado era crítico. Así, el comandante se desvió y obtuvo autorización para realizar un aterrizaje de emergencia en Palma.
Cuando el avión tomó tierra en Son Sant Joan, el falso enfermo fue trasladado al hospital Son Llàtzer, donde los médicos no encontraron ni rastro de la dolencia. Un pasajero que lo acompañó hasta el centro médico aprovechó para darse a la fuga.
Mientras, en la parte delantera del avión un nutrido grupo de pasajeros empezaron a agolparse en la parte delantera, provocando un «motín». Uno de ellos abrió una puerta de emergencia para retrasar el despegue y otros exigieron poder salir del aparato para fumar. De pronto, tras abrirse paso a empujones, 24 de ellos salieron de la aeronave, empezaron a correr por las pistas y saltaron una valla para escapar. El objetivo era entrar en España de forma irregular.
La Fiscalía señala que con esta acción provocaron una "situación sin precedentes en el espacio aéreo europeo que alcanzó notoria publicidad y repercusión internacional", ya que el aeropuerto estuvo varias horas cerrado y decenas de vuelos tuvieron que ser cancelados, desviados o retrasados. Como expone el ministerio público, el avión del que se fugaron los migrantes estaba sin vigilancia policial cuando los migrantes consiguieron escapar. El despliegue posterior de las fuerzas de seguridad permitió interceptar a doce de ellos en cuestión de horas. El resto fueron localizados en varios puntos de la isla en las semanas siguientes.
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