La víctima de Alaquàs estuvo en riesgo alto por los malos tratos

El fallecido tras precipitarse desde la azotea cuando trataba de huir había sido detenido por quebrantar el alejamiento

Las terrazas por las que trató de huir el presunto maltratador antes de precipitarse.

Las terrazas por las que trató de huir el presunto maltratador antes de precipitarse. / I. Cabanes

El presunto maltratador fallecido la noche del martes en Alaquàs tras precipitarse desde una azotea cuando intentaba huir de la policía ya había sido detenido en al menos dos ocasiones por quebrantar una orden de alejamiento respecto de su víctima. De hecho, la agredida había llegado a estar bajo protección como víctima de la violencia machista en riesgo alto, según las fuentes consultadas por este periódico, aunque las dos ordenes de alejamiento que había tenido ya no estaban en vigor.

El pasado martes por la noche, a las 21.15 horas, la mujer, de 40 años, telefoneó al 112 alertando de que su pareja estaba violento tras haber consumido drogas, le había agredido y robado. Además manifestó que tenía armas, concretamente una escopeta de caza.

Debido a este aviso se activó el protocolo ante un posible caso de violencia machista, más teniendo en cuenta que hasta hace pocos meses la reclamante se encontraba bajo protección precisamente por violencia contra la mujer. Al lugar acudieron rápidamente agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local de Alaquàs.

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Ignacio Cabanes

Al parecer, el presunto maltratador trató de escapar por la azotea, saltando desde una terraza a otra en esta misma manzana, situada entre las calles Miguel Hernández, Virgen del Carmen y Pare León. Hasta que en una de las esquinas habría intentando descolgarse hasta uno de los balcones del piso inferior.

Fue en ese momento cuando cayó al vacío en la calle Pare León de Alaquàs, desde una altura de unos cinco pisos. «La novia estaba llorando en la puerta, muy afectada», según relata un testigo de los hechos, mientras que los policías trataban de consolarla. «Le decían que no se sintiera culpable, que no había sido culpa de ella», explica este testigo.

Portaba varios gramos de coca

El cadáver de este hombre de 44 años, con antecedentes por violencia machista, fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de València, donde ayer le realizaron la autopsia. A la espera de las pruebas toxicológicas, se sospecha que el fallecido podría encontrarse en el momento de los hechos bajo los efectos de las drogas, según el testimonio que la víctima dio a los agentes.

Además, la policía localizó varios gramos de cocaína que el propio fallecido portaba encima. Al tratarse de un cantidad elevada que supera con mucho la que podría considerarse para consumo propio, los investigadores sospechan que el verdadero motivo por el que huyó el presunto maltratador no era por el aviso por violencia machista, sino para que no le intervinieran dicha cantidad de sustancia estupefaciente, por la que podría haber acabado preso.

Algunos vecinos apuntaron a este periódico que esa misma mañana la mujer ya había sido agredida, aunque no consta ninguna llamada por violencia machista hasta la realizada pasadas las nueve de la noche.