La Guardia Civil intenta identificar al asesino de Petar con el análisis de las cámaras y del cuchillo

Cada vez más cerca. Agentes del grupo de Homicidios de la Guardia Civil de València tratan de cerrar el círculo sobre el autor del asesinato de Petar Krasimirov, el hombre de 42 años muerto tras recibir una decena de cuchilladas en la espalda, el cuello y un costado a primera hora de la madrugada del 1 de agosto, en la avenida Joan XXIIIde Carcaixent.

Los principales elementos con los que cuenta los investigadores son las grabaciones de varias cámaras de seguridad, no solo de la calle donde se produjo el acuchillamiento de Petar, sino de otros puntos de Carcaixent por los que había pasado el presunto asesino antes y después del crimen, que adelantó en exclusiva Levante-EMV.

Además, los agentes cuentan con otros elementos a partir de los cuales podrían llegar a identificar al autor del asesinato, entre ellos el arma homicida, un cuchillo de grandes dimensiones que fue recuperado del interior de una papelera la misma noche del crimen, durante el rastreo realizado por especialistas del laboratorio de Criminalística y de Homicidios en los aledaños de la escena criminal.

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El cuchillo, en el departamento de Biología

De momento, especialistas del Departamento de Biología de la Guardia Civil tratan de obtener ADN del asesino a partir del análisis del arma, que ha sido priorizado al tratarse de una muerte violenta. Eso sí, en caso de aislar un perfil genético, este sería de utilidad en la resolución del homicidio solo en el caso de que su dueño esté fichado y su ADN conste ya en el fichero de identidades biológicas.

Así mismo, los investigadores cuentan, al parecer, con el testimonio de una persona que habría llegado a ver al autor del asesinato cuando huía a la carrera del lugar, aunque, según la información a la que ha tenido acceso este diario a través de fuentes de toda solvencia, no había podido identificar al fugitivo.

Enterrado en la intimidad

Mientras continúa esa investigación del grupo de Homicidios de la Guardia Civil, la familia pudo enterrar en la mañana de este viernes, en el cementerio de l’Olleria, a Petar Krasimirov, que tenía tres hijos, la mayor de ellos, de 14 años. El sepelio fue celebrado, con asistencia tanto de familiares y allegados como de amigos de la víctima, después de que lo autorizase la jueza de Instrucción número 7 de Alzira, que lleva la investigación.

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Tal como ha venido publicando este periódico, Petar salió de casa de sus padres, donde llevaba viviendo desde hacía apenas dos semanas tras la ruptura con su pareja, a las 0.18 horas del 1 de agosto, siete minutos después de que lo hiciera su hija de 14 años. Según dijo antes de salir, iba a vigilar a la niña para comprobar si realmente se iba a pasear con una amiga suya para despedirse porque la otra chica se iba de viaje, o si había quedado con un adolescente de 16 años con el que estaba iniciando una relación a la que su padre se oponía. 

La chica nunca llegó a cruzarse con su padre, porque, advertida por su abuela, volvió enseguida a casa, pero no por el mismo camino, sino callejeando. Mientras, Petar era acuchillado mortalmente apenas 22 minutos después de salir de casa, a la altura del número 38 de la avenida Joan XXIII de Carcaixent por alguien a quien, por ahora, la Guardia Civil aún no ha puesto nombre.

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