La Policía analiza cuatro cuchillos confiscados en casa de los presuntos autores del crimen de Natzaret

La Policía Científica está analizando cuatro cuchillos confiscados por agentes del grupo de Homicidios en dos domicilios en los que residían los dos presuntos autores del crimen de Natzaret, José M. M., de 22 años, y su padre, Diego M. M., de 43, quienes desde este jueves por la tarde se encuentran ya en la cárcel de Picassent, tal como ha adelantado Levante-EMV. Se trata de establecer si, como creen los investigadores, algunos de ellos son los empleados en esa agresión mortal ocurrida el pasado viernes, 2 de mayo, pasadas las 19.30 horas a la salida de la iglesia evangélica del valenciano barrio de Natzaret.

Según ha informado este viernes la Jefatura Superior de Policía de València, esas armas fueron intervenidas durante los registros domiciliarios practicados tras la detención de los sospechosos en Málaga, adonde habían huido para refugiarse de posibles represalias de los familiares de las víctimas, Antonio Flores, de 24 años, muertos tras recibir diez cuchilladas en su cuerpo, y su hermano Israel, de 17, que sigue grave en el Hospital La Fe como consecuencia de las dos lesiones de arma blanca recibidas, una en el estómago y otra en la ingle.

Se negaron a prestar declaración

Además de ellos dos, los agentes de Homicidios desplazados desde València a la barriada de las afueras de la capital malagueña donde estaban ocultos los sospechosos apresaron por encubrimiento, tal como adelantó este diario, a la madre de José y esposa de Diego, que, sin embargo, quedó en libertad aunque a disposición del juez que lleva el caso, el titular del Juzgado de Instrucción 3 de València, que todavía no la ha citado a declarar.

El comunicado policial agrega que, además de las armas, los investigadores también decomisaron "diversos efectos" no especificados que "podrían estar relacionados con los hechos investigados".

Tal como informó a primera hora de la tarde de ayer este diario, el juez de guardia de València decretó prisión provisional, comunicada y sin fianza para los dos presuntos autores del crimen de Natzaret, José M. M., de 22 años, y su padre, Diego M. M., de 43 años, detenidos el pasado lunes en una barriada de las afueras de Málaga tras una fulgurante investigación del grupo de Homicidios de la Policía Nacional de València.

Así lo acordó el jueves el titular del Juzgado de Instrucción 9 de València, en funciones de guardia, a instancias del fiscal, y después de examinar el atestado policial, teniendo en cuenta la gravedad de los delitos que se les imputan y las penas aparejadas a los mismos, así como el riesgo de fuga. Tanto el padre como el hijo se acogieron a su derecho a no declarar ante el juez y el fiscal.

Habían huido a Málaga

Tal como adelantó en exclusiva Levante-EMV este miércoles, los dos, junto con la madre y esposa de ambos, fueron apresados en Málaga, adonde huyeron poco después de atacar con armas blancas a las dos víctimas a la salida de la iglesia evangélica de Natzaret, en la calle Castell de Pop de ese barrio valenciano, sobre las 19.30 horas del pasado viernes.

La agresión mortal presuntamente cometida por José M. M. y por la que también está detenido y acusado su padre, Diego M. M. tuvo su origen en una bronca que se había producido en el chat de los feligreses de la iglesia evangélica de Natzaret, después de que la madre de las víctimas hubiese mostrado su disconformidad con cómo se había tocado el piano en el culto del jueves pasado.

Rabia y dolor en la despedida de Antonio Flores, el joven asesinado en Natzaret

El ahora arrestado se ofendió gravemente y llegó a decirle a la mujer que "le había perdido el respeto", pero lo que nadie imaginaba es que acabara yendo a esperarla a ella y a sus hijos a la salida del culto del día siguiente, viernes, y que la emprendiera a cuchilladas contra los jóvenes, provocando la muerte del mayor, Antonio, que recibió diez cuchilladas, y heridas graves al adolescente de las que aún se recupera en el Hospital La Fe.

Después de que el menor acuchillado abandonara la UCI y fuera trasladado a planta dada su mejoría, agentes del grupo de Homicidios de la Policía Nacional le iban a tomar declaración en el hospital. No obstante, según ha podido saber este periódico, la herida en el estómago habría empeorado y ha tenido que dejar de ingerir sólidos, por lo que los médicos recomendaron retrasar dicho interrogatorio hasta que su estado de salud sea óptimo.

Agresión a un pastor en La Torre

José M. M., de 23 años, tal como ha venido informando este periódico, ya protagonizó un incidente violento en otra iglesia de la misma confesión, en este caso, la de La Torre, durante el cual habría agredido al que en ese momento ejercía de pastor de la comunidad. Así lo han confirmado fuentes próximas a las víctimas, quienes han enmarcado ese hecho en el carácter irascible y conflictivo del ahora presunto asesino de Antonio Flores y de las heridas graves a su hermano Israel.

Según algunas fuentes, a raíz de la agresión al pastor, cometida hace más de un año, el presunto agresor fue invitado a no regresar a esa iglesia, mientras que otras fuentes afirman que fue el pastor quien, "para evitar males mayores", decidió cambiar de templo.