«¡En los cruceros no hay tripulantes españoles!», lamentaba hace tres años a bordo de un buque Carmen Fernández, directora de Crew Management & Consulting (CrewMC). En la actualidad esta emprendedora con amplia experiencia profesional en el ámbito marítimo tras su paso por departamentos de pasajes de Acciona Trasmediterránea y como agente de Quail Cruises, entre otras compañías, es reclutadora oficial del grupo Royal Caribbean en España (grupo que controla también las navieras TUI Cruises, Azamara Cruises, Celebrity Cruises, Pullmantur y Royal Caribbean), cuya plantilla de 110.000 tripulantes se reparte en una treintena de buques de la flota.
Las urbes flotantes que se asemejan a centros comerciales con cadenas de restaurantes, centros de entretenimientos y espectáculos transportan -en términos medios- unos 5.000 pasajeros y 2.600 tripulantes. Es decir, por cada dos clientes hay un empleado. Y son auténticos motores de generación de empleo.
«La idea original y el objetivo principal en la creación de CrewMC ha sido poner en conocimiento una alternativa laboral desconocida por la gran mayoría de los trabajadores, sobre todo jóvenes: ser tripulante», indica Carmen Fernández. En un negocio donde no se registran listas de desocupados, la ejecutiva , pionera en el proceso de reclutamiento de personal, garantiza que las mercantiles tienen serios problemas para cubrir demandas de camareros, cocineros, recepcionistas, guías turísticos, peluqueros, entrenadores personales, médicos... Y, es que, la actividad vinculada al ocio y turismo promueve miles de puestos y las perspectivas de futuro «son de crecimiento a la vista de los pedidos de buques anunciados por armadores de todo el mundo», reconoce la responsable de Crew Management & Consulting.
Un trabajo para todas las estaciones
«Una de las principales ventajas de los cruceros -apunta Fernández- es que puedes trabajar durante todas las estaciones. En todas las épocas del año navegan barcos surcando mares; los cálidos como el Caribe, en invierno. De este modo las oportunidades de encontrar ofertas durante un largo período de tiempo se multiplican». En estos gigantes del mar se trabaja mucho «aunque también es una experiencia única que permite conocer mundo y muchísima gente», sostiene esta directiva. La mayoría de los contratos tienen una duración de seis meses, si bien después de un periodo de descanso pueden volver a contratar al mismo personal. «La demanda de empleo es continua porque cada medio año los cruceros renuevan su plantilla», puntualiza Fernández.
Requisitos
Aunque la demanda de puestos de trabajo es amplia -y en ocasiones precaria según la categoría profesional- existen algunos requisitos de obligado cumplimiento. Los más importantes son la edad (habitualmente menos de 45 años), conocimiento de idiomas (inglés elemental), capacidad de trabajo en equipo, documentación y certificado de formación básica reconocidos oficialmente. Y hay que tener en cuenta que se convive con las mismas personas en un entorno cerrado durante bastante tiempo. Eso obliga a que sean sociables. De lo contrario el trayecto se hace muy largo en el buque.
Estas condiciones resultan necesarias para enrolarse en una actividad «donde el proceso de selección puede durar varios meses y en el que se acaban colocando unos veinte de cada cien candidatos que se interesan por la profesión», explica la CEO de Crew Management & Consulting tras entrevistar a cientos de candidatos.
Un buque de crucero es comparable a un complejo hotelero o de vacaciones, donde se emplea a innumerable personal con amplia gama de puestos y campos, cada uno de los cuales presenta diferentes posibilidades y diversos ingresos potenciales. Eso sí, también alguno de ellos no requieren experiencia. Las retribuciones salariales se sitúan en unos 1.400 dólares mensuales (libres de impuestos) más complementos en el caso de camareros, con lo que la nómina puede llegar a 2.000 dólares en esta categoría profesional. Mientras tanto, en el caso de los médicos, que se cotizan a 9.000 dólares, «son muy difíciles de encontrar», destaca Fernández. Por países, Filipinas es el que más camareras de piso aporta mientras que Brasil es punto de origen de gran parte del personal de espectáculos musicales.
Por lo que respecta a los convenios colectivos las compañías aseguran que cumplen las normas contempladas por la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Lo reconoce también esta profesional del área de recursos humanos. Eso sí, las vacaciones están descontadas del contrato porque las jornadas laborales son de lunes a domingo. Y de ocho horas por jornada.
Largo proceso de selección
El proceso de selección pasa por tener la capacitación profesional y los cursos marítimos es largo. Por eso, CrewMC trabaja en colaboración con la Cámara de Comercio de Castelló. Aunque desarrolla su en el ámbito nacional es una de las escasas profesionales del sector. La compañía destaca que está realmente interesada en ofrecer esta oportunidad laboral y de formación en la Comunitat Valenciana.
Cuenta Carmen Fernández que «los tripulantes valencianos por el mundo de los cruceros son escasos: medio centenar en Royal Caribbean. En medio del auge del sector de cruceros y de la competencia que arrecia entre puertos del Mediterráneo, la directiva de selección de personal del citado grupo naviero, desde una de las terminales de cruceros de València, reconoce que «todavía quedan muchas cosas por mejorar» en el recinto del Grao, sobre todo en accesos y servicios.
