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Pues no, esta vez «tampoco» es diferente

Es un clásico: una parte de los ahorradores tiende a pensar que cuando se produce una fuerte corrección estamos, sin ningún tipo de dudas, ante el gran batacazo, la gran caída de la que los mercados nunca se recuperarán. Es un instinto muy humano. Un reflejo. Una reacción de pánico.

A lo largo de mis más de treinta años como asesor financiero, puedo asegurarles que se repite una y otra vez, ya sea aquí, en Italia o en Singapur. Siempre y en todo lugar.

El entorno suele ser parecido, con la conjunción de varios factores. Por un lado, hay por medio alguna crisis geopolítica, por ejemplo, una guerra comercial entre gigantes económicos. Algo que a los ojos de mucha gente parece el detonante inminente de un cataclismo. Y todos los mercados se contagian tiñéndose de rojo con porcentajes ciertamente alarmantes. El pánico llama al pánico y es fácil ver bajadas de un 10% en unos pocos días en algún índice.

Asesores

Entonces, los asesores llamamos a los clientes y les recordamos que si estamos ahorrando a largo plazo no hay que cambiar de estrategia por lo que en esos momentos pasa en los mercados. Al contrario, si podemos, debemos plantearnos aprovechar la bajada de los precios para invertir más.

Pero muchos ahorradores, presa del pánico, sienten la tentación de salir corriendo, porque, aunque los mercados siempre se han acabado recuperando, ellos sienten que «esta vez es diferente». Pero no es así, esta vez es como las anteriores y como las próximas: los mercados suben y bajan abruptamente desde el principio de los tiempos. Un ejemplo: el Ibex 35 marcó su récord con 16.040 puntos en noviembre de 2007, un año después había caído a 6.817 y en el siguiente ejercicio superó los 11.000.

Color de los índices

Por datos como las anteriores, no me canso de repetir a mis clientes que las decisiones no deben venir marcadas por el color de los índices, sino por una estrategia diseñada con calma y un buen asesoramiento, apegada a las necesidades y las aspiraciones de cada uno. Y, luego, los gestores de los fondos seguro que aprovechan correctamente los vaivenes del mercado para comprar y vender cuando más convenga.

Por eso, cada vez que mis clientes me llaman alertados por el «esta vez es diferente», les reitero que las aguas vuelven siempre a su cauce. Es solo cuestión de tiempo y de paciencia.

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