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Uniendo esfuerzos

Uniendo esfuerzos

El pasado jueves tuvo lugar en Córcega una reunión del Grupo de Contacto de Cítricos del Comité Mixto hispano-franco-italo-luso. Con la incorporación de Portugal, este foro se consolida como punto de encuentro de los principales productores citrícolas de la Unión.

Los acuerdos comerciales firmados por la UE y las cuestiones fitosanitarias fueron los temas principales de la reunión. Sobre la primera cuestión, los participantes coincidimos en señalar que los cítricos deben ser considerados «productos sensibles» en las negociaciones, protegiendo con ello los intereses de los productores comunitarios frente a las posiciones de los terceros países. Acuerdos como el firmado con Sudáfrica no deben repetirse en los términos actuales, especialmente lesivos para nuestro sector. Casos como el posible acuerdo con Mercosur, que facilitaría la entrada de zumos procedentes de Brasil sin aranceles no deben producirse.

En materia fitosanitaria, acordamos seguir reclamando a la Comisión mayor contundencia a la hora de defender las plantaciones comunitarias frente a las amenazas procedentes del exterior. Es irresponsable no poner freno a las exportaciones de países que envían a nuestras fronteras cargamentos de cítricos que son interceptados en frontera por la detección de plagas y enfermedades de las que estamos libres. También es irresponsable ser cada vez más laxo con la actividad inspectora que debe evitar la entrada en territorio comunitario de esos cargamentos contaminados. El trío de irresponsabilidades se completa fiando a los propios países exportadores la evaluación de la efectividad de sus tratamientos frente a amenazas como la «falsa polilla», en lugar de establecer protocolos como el tratamiento en frío que ya exigen otros países a nuestras exportaciones.

El foro nos ayudará a seguir defendiendo estas y otras reivindicaciones ante las administraciones, sumando esfuerzos y creando posiciones comunes que hagan ver a la Comisión la importancia de nuestro sector y la necesidad de considerarlo como prioritario ante cualquier interlocutor.

No quisiera cerrar esta columna sin hacer una referencia a la importancia de la jornada electoral de hoy, en la que estamos llamados a escoger a nuestros dirigentes autonómicos y estatales durante los próximos cuatro años. Del resultado de los comicios saldrán los interlocutores ante los que tendremos que trasladar estas reivindicaciones. De la misma forma, de las elecciones europeas del 26 de mayo saldrán sus respectivos interlocutores para abordar estos y otros asuntos de gran trascendencia para el sector agrario. A unos y a otros, con independencia de su signo político, les tenderemos nuestra mano para colaborar en la defensa de nuestra agricultura.

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