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Sherlock Holmes vive en Long Beach

Joe Ide y su detective de la vieja escuela, un hombre solitario de gran inteligencia

Sherlock Holmes vive en Long Beach

Joe Ide (1948), posgrado en Educación, ha sido maestro de escuela, profesor universitario, gerente de empresas y director de una ONG. En los últimos años, ya jubilado de sus antiguos empleos, ha comenzado a escribir ficción criminal y, como buen admirador de sir Arthur Conan Doyle y de su detective Sherlock Holmes, su protagonista, Isaiah Quintabe, es un detective de la vieja escuela que desarrolla su trabajo en Long Beach. Ide ha escrito tres novelas con Isaiah Quintabe de protagonista: I. Q., Righteous y Wrecked, y se ha abierto ya un hueco en el mercado norteamericano de los detectives ficticios. Solo la primera de la saga, I. Q., se ha traducido al castellano y estas semanas la hemos podido ver en los escaparates de nuestras librerías.

I.Q. son las iniciales de Isaiah Quintabe, un detective sin licencia y que opera en la clandestinidad en Hurston, un barrio pequeño en el límite occidental de East Long Beach, a dos minutos del río de Los Ángeles y a dos y medio de la autopista 710, donde sus convecinos navegan por Google con la intención de fabricar el cloroformo a base de acetona y químicos para piscinas. Isaiah no tiene un sitio en internet, ni en Facebook ni en Twitter, pero la gente lo encuentra de todas maneras. Es un hombre solitario de gran inteligencia que ejerce de detective para las víctimas de la elevada criminalidad de esos barrios desatendidos por la desbordada policía de Los Ángeles. Sus clientes le pagan con lo poco que tienen: algunos con un pastel de boniato o limpiándole el jardín o con una flamante llanta radial, y eso cuando le pagan. De ahí que las circunstancias le obligan a buscar fuentes de financiación más sólidas, aunque no le guste lo que le plantean o proponen: «Si no pagas mucho dinero, es que no vale mucho dinero», se dirá para justificarse cuando acceda a coger ciertos casos. Así, acepta la propuesta de un rapero al que intentan asesinar. Con su amigo y colega Dodson, una suerte de doctor Watson del Long Beach de hoy, se adentra en el mundo del rap, escenario que el autor conoce a la perfección y que le sirve a su protagonista para aplicar la cadena deductiva hasta llegar a la verdad o al asesino, como un moderno Holmes sin necesidad del ADN ni de las huellas dactilares. De ahí que nos muestre con todo lujo de detalles unos personajes que pululan por el underground de ese estilo de música: pandilleros deseosos de emplear el tiempo en algo, prostitutas que se acercan al barrio o viven en él, abogados sin escrúpulos, asesinos a sueldo de capos de la droga, camellos de gatillo fácil, ambiciosos productores musicales€

No sólo Joe Ide nos traslada a los barrios pobres de Los Ángeles, a los enamorados de un estilo de música y al mundo que les rodea, también intentará resolver situaciones que quedaron pendientes en su pasado, en especial con Skip, su antiguo compañero de escuela, un sujeto que era una larga cadena de noes: no era un atleta, no era un deportista, ni un estudiante de honor, ni del club de teatro€ Anónimo, era lo único que en realidad era.

Tengo la impresión que I. Q. va a gustar al lector español aficionado a las novelas de intriga, pues es un thriller divertido y de fácil lectura, con personajes extravagantes, escenas pintorescas y diálogos delirantes, que le sirven al autor para escribir una sátira del mundo actual. Al final, el leitmotiv de la novela es mostrarnos el Up from nothin, el «subir desde la nada» como máxima aspiración de los personajes de un submundo que nadie conoce ni se sabe dónde está.

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