Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Séptimo arte

Alfred Hitchcock, el arquitecto de la ansiedad

El próximo 13 de agosto se cumplen 120 años del nacimiento de Alfred Hitchcock. Una guía examina las claves creativas del maestro del suspense.

Alfred Hitchcock y Grace Kelly en una en el rodaje de «Crimen perfecto».

En el celebrado y convertido en clásico de la bibliografía cinematográfica, El cine según Hitchcock, el director François Truffaut en la introducción escribe: «Cuando se observa atentamente la carrera de Hitchcock, desde sus películas mudas inglesas hasta sus películas en color en Hollywood se encuentra la respuesta a algunas de las preguntas que todo cineasta debe plantearse; la primera y principal es: ¿Cómo expresarse de una forma puramente visual?». Ahora, cuando el próximo 13 de agosto se cumplirán 120 años del nacimiento del director ingles, los estudios sobre la obra hitckcockiana se siguen interrogando sobre las claves de un realizador que acabó creando uno de los más poderosos universos visuales del siglo XX. Desde su desaparición en 1980 la figura de Alfred Hitchcock no ha dejado de suscitar el interés tanto de la crítica especializada como del gran público, ya se trate de un volumen biográfico o un ensayo sobre sus heroínas cinematográficas o un biopic para la gran pantalla.

Del realizador de un cine comercial y de entretenimiento al celebrado creador promocionado por los jóvenes críticos franceses de la Nouvelle Vague a la altura de directores como Jean Renoir, Ingmar Bergman, Federico Fellini o Luis Buñuel, la sombra cinematográfica y creativa de Hitchcock no ha dejado de ensancharse mientras títulos como Extraños en una tren, Vértigo, Con la muerte en los talones, Psicosis o Los pájaros siguen animando las veladas cinematográficas celebrados como obras de culto. El historiador de cine Paul Duncan se une al grupo de estudiosos con el libro Alfred Hitchcock. Todas las películas (Taschen), un recorrido exhaustivo por la filmografía del director de "Rebeca". Después de haber hecho otro tanto con la obra de Charles Chaplin, Francis Ford Coppola, Ingmar Bergman, Duncan se adentra en ese gran laberinto creativo que constituye el cine de Alfred Hitchcock descubriendo al lector, en una guía detallada de cada una de sus películas, los códigos que han hecho de su filmografía una de las grandes obras de la historia del cine del siglo XX. Descifrar la obra de un director que tuvo en suspense a los públicos de todo el mundo. Es «esta voluntad de retener la atención cueste lo que cueste» a juicio de François Truffaut una de las principales características de su obra. Una singularidad que «convierte a sus films en algo muy particular e inimitable». «Hitchcock ejerce su influencia y su dominio no sobre los momentos cumbres de la historia, sino también sobre las escenas de exposición, las escenas de transición y todas las escenas habitualmente ingratas en los films».

Como señala Paul Duncan, Hitchcock es un maestro a la hora de conjugar un lenguaje cinematográfico accesible para todos los públicos por su simplicidad y claridad y a la vez proyectar en la pantalla las relaciones más sutiles entre los seres humanos. Un creador que ha sabido construir un estilo identificable para toda clase de públicos. Ese estilo hitchcockiano capaz de resaltar, gracias a la calidad dramática del encuadre, una simple escena de conversación entre dos personajes. En definitiva, el arte de un creador y una obra, comercial y experimental, universal y confidencial.

Paul Duncan, como antes señaló François Truffaut, enmarca la figura de Alfred Hitchcock en ese grupo de «artistas de la ansiedad». Ese club de creadores cuya misión «consiste en obligarnos a compartir sus obsesiones». «Con ello, incluso y eventualmente sin pretenderlo, nos ayudan a conocernos mejor, lo que constituye un objetivo fundamental de toda obra de arte».

Compartir el artículo

stats