Culminando con la convocatoria dedicada a revisar trayectorias artísticas relevantes por sostenidas, extensas y fructíferas, el Centre del Carme acoge la retrospectiva de 50 años de camino de una artista que no sólo ha sido fiel a un estilo singular y rupturista ante las diversas tendencias temporales de éxito con las que ha convivido, sino que además cuenta con una plena vigencia en su interpretación del mayor de los abstractos: el universo en ejercicio.
En el fragmento encuentra Fuencisla Francés el quid de su propuesta abstracta según un modo de operar en el que las partes no se suman en un todo sino que lo multiversionan en constante transformación: la autora segoviana, afincada en València, práctica el collage disponiendo fragmentos pictóricos informalistas en el espacio cual escenografías a la vez coreográficas y musicales según las experiencias sinestésicas que provocan. Cromáticamente duales según la razón de opuestos que proponen de vacío y luz, peso y levedad, e imágenes cósmicas en su definición sinfín, en su obra las ideas de ritmo y estructura en ejecución son plasmadas por las experiencias ópticas de la concentración y la expansión dinámica formal de modo tal que movimiento e inercia se hibridan en una misma matriz germinal, energética, fecunda. Una estructura universal que contiene todos los órdenes posibles aquí expuestos: el del enjambre y el de la nebulosa, el del estrato geológico y el del estado espiritual.
Pintura que trasciende la dimensionalidad de su soporte para irradiarse, su campo de acción -entre las experiencias cinéticas y las neoexpresionistas- encuentra acomodo en la tradición del environment en el doble sentido del paisaje y la inmersión en el mismo, cuestión formalizada en esta muestra de obvia referencia a la organización primaria de la naturaleza a través de la intervención pictórica de la arquitectura, con soportes tridimensionales, instalación escultórica y creación de microambientes, espacios entre espacios dispuestos como capítulos sensoriales a experiencias inmersivas cuyo accionar hace de la percepción experiencia.
Distantes los años anteriores a acabar el milenio pasado cuando seleccionamos a Fuencisla Francés para el Panorama de la Crítica organizado por Posdata en el Club Diario Levante en 1998, dos décadas después, su obra, un enhebramiento de planos que se superponen virtualizando la perspectiva encuentra vigencia en la noción cuántica del multiverso al otro lado de nuestro punto de fuga. Ello bien vale el homenaje.
