Siete incendios forestales, que superan diez veces los criterios de clasificación de emergencia de Ucrania, están rodeando a la central nuclear de Chernóbil y pueden dispersar los contaminantes radiactivos que quedaron del accidente nuclear de 1986, sin que esté operativo un sistema se seguimiento.

El Boletín de Científicos Atómicos advierte que siete incendios forestales se han declarado en la zona de exclusión que rodea la planta de energía nuclear de Chernobyl, el sitio del peor desastre nuclear del mundo, citando un comunicado del Parlamento de Ucrania. 

El Boletín es una publicación académica fundada en 1945 por Albert Einstein y los científicos de la Universidad de Chicago que ayudaron a desarrollar las primeras armas atómicas en el Proyecto Manhattan.

La Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) también ha expresado su preocupación por los incendios y señalado al respecto que está buscando más información sobre la situación de su contraparte ucraniana.

Los incendios, que se observaron vía satélite, superan diez veces los criterios de clasificación de emergencia de Ucrania y los funcionarios ucranianos los atribuyen a ataques rusos, aunque este extremo no ha podido confirmarse.

Riesgo nuclear

Los incendios forestales corren el riesgo de movilizar y dispersar los contaminantes radiactivos que quedaron del accidente nuclear de 1986 en Chernobyl, advierte el citado Boletín.

Los bomberos ucranianos no han podido acceder a la zona desde que Rusia tomó el control de la central nuclear de Chernóbil en los primeros días de la guerra. 

Energoatom, la compañía nuclear estatal de Ucrania, también informó esta semana que el sistema de seguimiento de radiación de Chernobyl ya no funciona. 

La Inspección Reguladora Estatal Nuclear de Ucrania (SNRIU) ha denunciado asimismo que los parámetros de seguridad en la central de Chernobil y la situación de la radiación indica una tendencia de deterioro constante de una serie de indicadores.

Aunque los incendios forestales estacionales son comunes durante la primavera y el verano en la región que rodea a Chernóbil, el Departamento de Cooperación Internacional y Relaciones Públicas de la central nuclear destaca que este año han comenzado antes de tiempo y que no se ha preparado un plan de contingencia para la eventualidad de incendios forestales como los que se han planteado estos días.

Problemas también con los desechos

Por otro lado, la agencia AP informa que las fuerzas militares rusas han destruido un laboratorio situado en la planta de energía nuclear de Chernobyl que, entre otras cosas, trabajaba para mejorar la gestión de los desechos radiactivos. La agencia cita como fuente la agencia estatal ucraniana responsable de la zona de exclusión de Chernobyl.

La agencia estatal dijo que el laboratorio, construido a un costo de 6 millones de euros con el apoyo de la Comisión Europea, se inauguró en 2015.

El laboratorio contenía “muestras altamente activas y muestras de radionúclidos”, dijo la agencia en su comunicado. Los radionúclidos son átomos inestables de elementos químicos que liberan radiación.

A principios de este mes, la planta fue desconectada de la red eléctrica, lo que generó preocupaciones sobre el control del nivel y la temperatura del agua en las piscinas de enfriamiento de combustible nuclear gastado. La planta operó con generadores diésel de emergencia durante el corte de energía y desde entonces se ha restablecido la energía.

SNRIU ha informado por último que, aunque finalmente ha habido una rotación del personal técnico ucraniano que había estado en el lugar durante 25 días (desde que las fuerzas rusas tomaron el control), no ha sido posible llevar a cabo el mantenimiento y la reparación programados de sistemas y equipos.