Neurobiología

Fantástico descubrimiento sobre el cerebro humano

Una cuarta meninge depura el líquido cefalorraquídeo para mantenerlo siempre limpio

Una nueva meninge protegería mejor al cerebro de posibles daños.

Una nueva meninge protegería mejor al cerebro de posibles daños. / Aleksander en Pixabay.

Redacción T21

El sistema defensivo del cerebro está formado por cuatro meninges, no por tres, como se creía hasta ahora. La cuarta meninge está repleta de células inmunitarias y podría ayudar en el tratamiento del Alzheimer y de la esclerosis múltiple.

Científicos de las universidades de Rochester (NY) y de Copenhague (Dinamarca), liderados por el neurobiólogo danés Maiken Nedergaard, han obtenido lo que denominan un fantástico descubrimiento sobre el cerebro humano, del que informan en un artículo publicado en la revista Science.

Se trata de una cuarta meninge, un hallazgo que obligará a reescribir los libros de texto porque hasta ahora se había establecido que el cerebro solo tenía tres meninges.

Las meninges son tres membranas que protegen al sistema nervioso central envolviendo al encéfalo y la médula espinal, separándolos así de las paredes de los huesos que los rodean.

La función de las meninges, además de proteger al encéfalo y la médula espinal, es también la de dar soporte a los vasos sanguíneos y la de formar una cavidad continua a través de la cual circula el líquido cefalorraquídeo (LCR).

El LCR fluye dentro y alrededor del cerebro y de la médula espinal para amortiguar un impacto en caso de una lesión y para proporcionarles nutrientes.

Depuradora cerebral

La cuarta meninge ahora descubierta es una membrana súper delgada que se suma a las tres membranas previamente reconocidas que, en conjunto, forman una barrera protectora alrededor del cerebro.

La cuarta meninge se llama Membrana Similar a la Linfática Subaracnoidea (SLYM) y tiene varias funciones. La principal función es que divide el líquido del cerebro en dos compartimentos, de modo que hay líquido sucio en uno y líquido limpio en el otro.

Esto significa que el sistema glinfático, que limpia el cerebro cuando dormimos, recibe líquido limpio cuando tenemos un cerebro sano y fresco, mientras que el sucio puede salir por otro lado, explica Nedergaard en un comunicado.

Si la membrana de esta cuarta meninge se rompe, los líquidos se mezclan. Esto puede ser problemático porque puede hacer que los productos de desecho, como las proteínas descompuestas, vuelvan al cerebro.

El cerebro dispone de una depuradora propia.

El cerebro dispone de una depuradora propia. / Mohamed Hassan en Pixabay.

Más células inmunitarias

La segunda función de la cuarta meninge está conectada con el sistema inmunológico del cerebro. Las células inmunitarias de las meninges escanean continuamente el líquido meníngeo en busca de signos de infección o daño celular. Si encuentran un problema, activan el sistema inmunológico.

Las otras tres meninges implicadas en estas funciones son las membranas de la Duramadre, de la Aracnoides y de la Piamadre. La cuarta meninge divide el espacio situado debajo de la capa aracnoidea, el espacio subaracnoideo, que contiene líquido cefalorraquídeo (LCR).

La SLYM, a diferencia de las otras meninges, está repleta de células inmunitarias, lo que sugiere su importancia para las defensas del cerebro. Estas células pueden usar la SLYM para vigilar el LCR en busca de signos de infección o inflamación.

La caracterización funcional de SLYM proporciona información fundamental sobre las barreras inmunitarias cerebrales y el transporte de fluidos, enfatizan los investigadores en su artículo.

Aplicaciones médicas

El nuevo descubrimiento podría tener implicaciones para el estudio de lesiones cerebrales y enfermedades neurológicas como la esclerosis múltiple y el Alzheimer, consideran los investigadores.

En su estudio, observaron que el número y la diversidad de células inmunitarias en SLYM aumentaron en respuesta a la inflamación y el envejecimiento.

Por eso sugieren que la ruptura física de SLYM podría, al alterar los patrones de flujo del LCR, explicar la supresión prolongada del flujo glinfático después de una lesión cerebral traumática, así como el mayor riesgo postraumático de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.

Aprender más

En resumen, esta nueva estructura meningítica podría estar influyendo en una serie de condiciones cerebrales y, según los investigadores, su descubrimiento debería ayudarnos a comprenderlas mejor.

Son estas propiedades meningíticas las que los investigadores seguirán estudiando, con la esperanza de aprender más sobre la enfermedad de Alzheimer y otras enfermedades en las que el cerebro y sus funciones fallan.

Referencia


A mesothelium divides the subarachnoid space into functional compartments. Kjeld Møllgård et al. Science, 5 Jan 2023, Vol 379, Issue 6627, pp. 84-88. DOI: 10.1126/science.adc8810