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Neurociencias

Descubren nuevas estrategias para mejorar la memoria en cerebros envejecidos

La manipulación genética de ciertos factores podría devolver plasticidad sináptica y favorecer la memoria en una edad avanzada

Determinadas modificaciones genéticas podrían potenciar la memoria durante el envejecimiento.

Determinadas modificaciones genéticas podrían potenciar la memoria durante el envejecimiento. / Crédito: Iffany en Pixabay.

Pablo Javier Piacente / T21

La pérdida de memoria no es simplemente un síntoma del envejecimiento: dos nuevas investigaciones muestran que está relacionada con cambios moleculares específicos en el cerebro, y que ajustar esos procesos puede mejorar la memoria.

Dos estudios dirigidos por investigadores de Virginia Tech, en Estados Unidos, sugieren que el deterioro de la memoria asociado al envejecimiento podría revertirse o reducirse mediante diferentes estrategias. Ambos trabajos, publicados en las revistas Neuroscience y Brain Research Bulletin, se enfocan en roedores e identifican mecanismos moleculares que pueden reajustarse con herramientas genéticas, para restaurar funciones de aprendizaje y memoria en una edad avanzada.

Regulación en la memoria tardía

Según una nota de prensa, los autores observaron que las ratas macho de veinticuatro meses de edad presentan una reducción en la expresión en el hipocampo, la región clave para la formación de recuerdos, de un componente genético específico. Al emplear un sistema de manipulación genética, los investigadores lograron restaurar la expresión del gen y mejorar la retención de memoria en las ratas envejecidas.

Además, la manipulación genética aumentó la potencia de un marcador fisiológico de plasticidad sináptica. Estos efectos se apreciaron en relación directa con la edad: no se observaron mejoras en ratas de mediana edad, un dato que sugiere un papel específico de la regulación epigenética en la memoria tardía, según concluye uno de los estudios.

Referencias

  • Age-related dysregulation of proteasome-independent K63 polyubiquitination in the hippocampus and amygdala. Yeeun Bae et al. Neuroscience (2025). DOI:https://doi.org/10.1016/j.neuroscience.2025.06.032
  • Increased DNA methylation of Igf2 in the male hippocampus regulates age-related deficits in synaptic plasticity and memory. Shannon Kincaid et al. Brain Research Bulletin (2025). DOI:https://doi.org/10.1016/j.brainresbull.2025.111509

Cambios moleculares y plasticidad sináptica

En el otro trabajo, los autores descubrieron que el factor genético K63 aumenta en el hipocampo a lo largo de la vida, mientras que en la amígdala su dinámica muestra una reducción. Al disminuir experimentalmente la actividad de K63 en el hipocampo de las ratas envejecidas, lograron potenciar la memoria contextual y mejorar parámetros sinápticos. Los efectos tampoco se observaron en ratas de mediana edad, como sucedió en el primer estudio.

Ambas investigaciones dibujan un mapa más complejo del envejecimiento cerebral de lo pensado hasta hoy: distintos procesos moleculares cambian en direcciones opuestas, según la estructura y la etapa de la vida. En consecuencia, de confirmarse estos resultados en humanos, intervenir de forma selectiva, restaurando la expresión de genes que favorecen la plasticidad en el hipocampo o ajustando otras rutas genéticas, haría posible devolver o potenciar funciones cognitivas perdidas durante el envejecimiento.

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