Alboraia es conocida por la horchata pero tiene muchos atractivos turísticos. Uno de ellos es la Parroquia de la Asunción de Nuestra Señora. Data de 1731 aunque en 1240 ya aparece en los archivos de la Catedral de Valencia. Se trata de un templo de tres naves, con capillas laterales y decoración interior barroca. Situada en la plaza de la Constitución, conforma un interesante conjunto urbanístico.

La Ermita del Milagro de los peces, también conocida como Ermita dels Peixets, fue construida para conmemorar este milagro. Se sitúa en la desembocadura del barranco del Carraixet, en su margen derecha. El edificio actual es de estilo neogótico, con la fachada dividida en tres cuerpos, ventanales ojivales y tejado a dos aguas. En el lado derecho se puede observar un panel cerámico con la alusión al milagro.

Cabe destacar la Ermita de San Cristóbal: de pequeña nave en plena huerta, entre el polígono industrial y el Barranco del Carraixet, de cuerpo único con la sacristía detrás del altar y el coro arriba de la puerta de entrada.

También debe visitarse la Ermita de Vilanova o del Cristo de las Almas, la Ermita de Santa Bárbara y la Ermita de San Andrés o Sagrado Corazón de Jesús, la Capilla del Colegio de las Marianistas y la Capilla de Saplaya.

La arquitectura civil de Alboraia está representada por las casas urbanas modernistas de finales de siglo XIX y principios del siglo XX, así como las alquerías moriscas y casas de huerta. Destaca especialmente el Pont del Moro. Es un puente románico de piedra de sillar, sin barandillas, que en origen salvaba la acequia de Vera entre la Patacona y la Malvarrosa (València).

También hay que reseñar la Casa Comte Zanoguera, edificio señorial ubicada en el núcleo antiguo de la población. La actual casa data del siglo XVII y desde su última restauración es utilizada para albergar exposiciones y actos públicos y oficiales.

Otro edificio a visitar es el Teatro l’Agrícola. Construido a principios del siglo XX, contiguo al Ateneo Mercantil, fue utilizado como salón de actos y sala de reuniones. Recientemente reformado es hoy teatro y sala de cine, con plena actividad todo el año, excepto en los meses de verano.

Las barracas son un referente arquitectónico en la huerta valenciana y también las podremos encontrar en la de Alboraia.

Lo más representativo de la gastronomía de la localidad es la hochata, por el cual es conocida esta población en toda España. Se elabora a base de chufas, tubérculo que se cultiva en este término municipal casi exclusivamente, cuyo zumo se mezcla con agua y azúcar, todo lo cual se somete a refrigeración y se sirve líquida o helada, acompañada de «fartons».