Cerca de la costa, pero en el interior. A escasa media hora del litoral mediterráneo, hacia el interior de la provincia de Valencia, se encuentra la milenaria e histórica ciudad de Xàtiva, con un amplio conjunto patrimonial. La localidad setabense siempre se ha caracterizado por ser un importante nudo de comunicaciones y centro de servicios, rasgos propiciados por su situación geográfica, como camino de obligado paso para las primeras civilizaciones que entraron por el Mediterráneo hacia el centro de la península.

Desde los primeros asentamientos prehistóricos en el yacimiento neolítico de la Cova Negra, pasando por los íberos, romanos, visigodos o musulmanes, hasta los reconquistadores catalanes y aragoneses, todas las civilizaciones han ido dejando su impronta en una ciudad única por su inmenso patrimonio histórico y artístico. Xàtiva está declarada Conjunto Histórico Artístico, ya que cuenta con siete monumentos nacionales, entre los que se encuentran el Castillo de Xàtiva, la Colegiata, el Hospital, las Iglesias de Sant Feliu y Sant Francesc, el Convento de Sant Domènec y el Museo del Almodí, así como numerosos edificios declarados como Bienes de Interés Cultural (BIC).

El castillo y conjunto histórico de Xàtiva han sido elegidos como una de las siete maravillas valencianas. Allí nacieron los dos papas españoles, Calixto III y Alejandro VI –artífices e iniciadores de la ascensión al poder de la familia Borja–, así como el pintor José de Ribera, el Españoleto, entre muchos otros hijos ilustres.

La impresionante colección de fuentes monumentales de Xàtiva le ha valido el sobrenombre de la Ciudad de las Mil Fuentes, contando también con numerosos vestigios arquitectónicos de la ingeniería del agua de la época musulmana y otros elementos patrimoniales relacionados.

El rico legado cultural de Xàtiva se puede conocer a través de diferentes actividades. Por ejemplo, la Ruta de los Borja, que recorre diversos lugares monumentales vinculados a la saga valenciana más relevante de la historia o la Ruta de la Crema de Xàtiva, donde los visitantes pueden conocer mejor cómo afectó a la ciudad la Guerra de la Sucesión y por qué el retrato del rey Felipe V cuelga boca abajo en el Museo de Bellas Artes de la Casa de la Enseñanza.

Xàtiva también cuenta con una gastronomía única. Sus principales especialidades culinarias son el arroz al horno y los dulces árabes típicos, como son el arnadí y la monxavena. Si se tiene la ocasión, merece la pena probar los ajos tiernos de Xàtiva, principal producto agrícola de la ciudad. Todo ello regado por los caldos de la vecina zona vinícola de Terres dels Alforins.