Llueve. Hace frío. Estamos encerrados en casa. Las calles están desiertas. Pero miramos el calendario y estamos en primavera.Sí. Y esta estación propone apostar por verduras de color verde . Te recomendamos tres "verdes" y una de color.

Espárragos: son muy ligeros y de alta calidad nutricional, ya que ofrecen fibra, potasio, carotenos y vitamina A al organismo. Además, son fuente de quercetina y otros flavonoides antioxidantes y poseen saponinas que actúan como prebióticos y benefician la salud pudiendo revertir dislipemias o prevenir las mismas, así como contribuir a reducir la incidencia de cáncer.

Judías verdes: son una buena fuente de vitamina C, fibra, carotenos y vitaminas del complejo B, sobre todo ácido fólico y además de estos nutrientes la judía verde es una de las hortalizas que mayor contenido proteico tienen por lo que ayudan a saciar al organismo con muy pocas calorías.

Pepino: es una de las hortalizas con mayor proporción de agua en su composición y por ello, puede ayudarnos a lograr una buena hidratación sin casi sumar calorías a la dieta, así como reducir el hinchazón. Es una opción refrescante para cuando las temperaturas comiencen a subir y buena fuente de fibra, así como de vitaminas del complejo B para el organismo. También posee diferentes compuestos bioactivos que tienen efecto antidiabético, antioxidante e hipolipemiante.

Zanahoria: es una de las hortalizas que más carotenos y vitamina A concentran, por lo que además de tener función antioxidante, ofrece otros beneficios por su contenido. Asimismo, la zanahoria es uno de los alimentos que más nos puede ayudar a proteger la piel y la visión ante la exposición al sol.