Con más de dos décadas de trayectoria, Bodega Sierra Norte es una de las firmas vinícolas valencianas de mayor prestigio. De la mano de Manuel Olmo y un importante equipo de profesionales, la firma se ha consolidado entre los grandes productores, aunque eso no ha hecho que se les catalogue como bodega de volumen, y sus vinos son, cada vez más, sinónimo de calidad, compromiso y, desde hace ya algún tiempo, también de solidaridad.

Desde su origen, Sierra Norte ha tenido como objetivo contribuir a preservar su entorno. Fue la primera bodega valenciana en introducirse en el mundo de la producción de vinos ecológicos, y a fecha de hoy, todas sus referencias lucen el sello del certificado oficial de agricultura ecológica, además de ser aptos para veganos al no utilizar en el proceso productos de origen animal. Pero para la firma con sede en Requena, preservar el entorno va más allá de un compromiso con la ecología. Ricardo Calatayud, director comercial de la compañía, reconoce que «Sierra Norte no tendría sentido sin esa actitud por crear un futuro mejor allí donde opera. Creemos que es responsabilidad nuestra poner esta zona en valor, no solo apostando por la ecología, sino también diseñando nuevos edificios energéticamente sostenibles y evitando la huella de carbono».

Para Calatayud, ese compromiso con el entorno es algo «que nos mueve en el día a día. Cada paso que damos adelante tiene alguna vinculación en este sentido». El responsable comercial de la bodega se refiere a iniciativas que se acaban de implementar en las nuevas instalaciones de la aldea requenense de Calderón, donde desarrollan un proyecto de enoturismo en el que también implican a estudiantes. «A través del enoturismo hemos encontrado una vía para difundir todas las posibilidades profesionales que se pueden encontrar en zonas rurales como ésta. Nuestro equipo de enoturismo, en colaboración con un grupo de profesores y pedagogos, han diseñado un modelo de visita dirigido a niños de infantil y primaria que más adelante se extenderá también a alumnos de secundaria. En las visitas se muestra a los más pequeños como es todo el proceso del vino con un lenguaje adaptado para ellos, dándole importancia al viñedo, pero también a otras facetas menos conocidas de la bodega. Es nuestra particular manera de luchar contra la España vaciada y de hacer ver a las siguientes generaciones que hay un futuro digno en las zonas rurales». Las visitas de colegios a la nueva bodega de Calderón han tenido una magnífica acogida pese a las limitaciones sociales que estos últimos meses nos ha impuesto la pandemia, y las previsiones que maneja el departamento de enoturismo hacen prever que esta iniciativa se mantenga de manera habitual.

Pero además de comprometida, Sierra Norte es también una bodega solidaria. En los últimos años han participado en diversas iniciativas corales como la impulsada hace algo más de un año entre los profesionales de la sanidad, que tuvieron la oportunidad de visitar diversas bodegas con la campaña ‘Enoturismo para sanitarios’; pero sin duda son los proyectos de Asindown los que canalizan hoy en día todo el compromiso solidario de la bodega. Calatayud reconoce que «trabajar con el colectivo Asindown nos ha hecho cambiar nuestra manera de ver el mundo. Empezamos la relación patrocinando el calendario que editan cada año, pero un día nos convocaron a una reunión en sus instalaciones de València para hablarnos de algunos de sus proyectos y la visita nos emocionó de tal manera que nos atraparon».

A partir de ahí la bodega se ha involucrado en el día a día de la asociación y ha creado una línea de vinos específica (los ‘Genéticamente rebeldes’) de los que destina una parte significativa de sus ventas a financiar algunos de los proyectos formativos que Asindown desarrolla en la actualidad. Algunos de sus alumnos, además, han participado como personal de sala sirviendo los vinos en algunas catas organizadas por la bodega. Ricardo advierte que «‘Genéticamente Rebeldes’ no es una edición limitada de un vino concreto, sino una más de nuestras marcas que comercializamos en los canales habituales (está disponible en el Corte Inglés, Carrefour y la mayoría de tiendas especializadas de la Comunitat Valenciana). Queríamos que fuese un buen vino, que la gente lo pidiese no solo por su vocación solidaria».