El impulso de los productos valencianos de calidad

Proava celebra sus primeros treinta años de vida

La sede de Proava se ubica sobre el cellerdel siglo XIII.

La sede de Proava se ubica sobre el cellerdel siglo XIII. / Urban

Vicente Morcillo

Con más de un centenar de asociados y decenas de eventos y actividades celebradas con el objetivo de contribuir a la promoción de los productos agroalimentarios de calidad de la Comunitat Valenciana, Proava es, desde hace tres décadas, el principal impulso para el sector agroalimentario de calidad en la Comunitat Valenciana. La entidad surgió al abrigo de la Mostra de Vins que, en 1987, comenzaron a organizar un grupo de empresarios agrupados en el colectivo ‘Els Bodeguers’; y durante estos treinta años ha trabajado para mantener la esencia de esa primera Mostra, adaptando su formato a los nuevos tiempos y creando eventos dinámicos con los que han vehiculizado el esfuerzo del sector por poner en valor los productos valencianos de calidad, si bien la asociación cumple hoy otros cometidos más allá de la organización de la Mostra.

Tras el origen de Proava se encuentran Eduardo Mestres y Vicente Seguí, unos visionarios que junto a otros miembros de la Asociación de licoristas y tiendas especializadas en vinos ‘Els Bodeguers’ impulsó la organización de una Mostra de Vins a la que, en su primera edición apenas acudieron 16 bodegas valencianas. Ajenos al desánimo siguieron empeñados en mantener vivo el proyecto, que fue creciendo en expositores y visitantes de manera exponencial hasta que, seis años después, se encontrasen en la tesitura de crear un colectivo con identidad propia que tuviese como principal función la responsabilidad de organizar un certamen que ya por entonces se acercaba al centenar de participantes.

La Mostra de Vins fue, en elaño 1987, el germen para elnacimiento de Proava.

La Mostra de Vins fue, en el año 1987, el germen para el nacimiento de Proava. / POR VICENTE MORCILLO

El nacimiento de Proava supuso el impulso definitivo para la consolidación de la Mostra de Vins (que ya entonces había incorporado a su nombre la extensión ‘alimentos tradicionales’, abriendo la oferta en el certamen a otros productos típicos valencianos que maridaban a la perfección con los vinos, cavas y licores), pero también el inicio de un proyecto en común en el que actualmente están representados más de un centenar de productores, en su mayoría bodegas, pero también firmas de aceites, dulces y turrones, embutidos, cervezas artesanas, quesos y otros productos agroalimentarios valencianos.

Sin duda, durante estos 30 años, y al margen de la Mostra y otros eventos, el gran hito de Proava ha sido la rehabilitación del antiguo Celler del siglo XIII, un entramado de cuevas y recintos subterráneos que se encontraban bajo la actual sede de la entidad, en la c/ Baja de València. El Celler Medieval fue una de las primeras construcciones que albergó el barrio del Carmen. Data del siglo XIII, y se ha constatado que durante los 200 primeros años se elaboró, almacenó y vendió vino, aceite y cereal.

Durante años Proava trabajó en la puesta en valor de este patrimonio, buscando apoyo de las administraciones públicas y desarrollando un proyecto de rehabilitación que ha servido para convertir el hallazgo en un espacio único, 100% visitable, que se postula como centro de interpretación del vino y que acoge diversas actividades durante el año como catas, talleres, exposiciones, maridajes o presentaciones.

Otra de las funciones que ha asumido Proava a lo largo de estos años es la de la organización de diferentes concursos de vinos, espumosos y aceites valencianos, iniciativa heredada también de ‘Els Bodeguers’, que hasta bien entrado el siglo XXI organizaba un concurso para elegir los mejores vinos que participaban cada año en la Mostra.

Proava pulió también ese proyecto, tomando el testigo y convirtiendo ése y otros concursos (vinos monovarietales, cavas y espumosos, vinos ecológicos y aceites) en citas oficialmente reconocidas por la Consellería de Agricultura, promocionando la importancia de estos galardones entre la sociedad y visibilizando el trabajo de las decenas de bodegas que actualmente elaboran vino en la Comunitat Valenciana.