«L’Odissea de les nostres vides», la ausencia del padre

Teatro de lo Inestable celebra con una pieza de Jacobo Pallarés, en coproducción con Rambleta, su 25 aniversario

Los intérpretes de «L’Odissea de les nostres vides"

Los intérpretes de «L’Odissea de les nostres vides" / Urban

A.B.

L’Odissea, de les nostres vides» es la nueva creación de Teatro de lo inestable, una pieza de Jacobo Pallarés en coproducción con Rambleta, con la que la compañía, y el propio autor, celebran su 25 aniversario en las artes escénicas. La obra, que se estrena hoy en Rambleta, «forma parte del programa de coproducciones del centro cultural», ha señalado su directora Rocío Huet, con el que «se busca fomentar la creación y la producción en las artes escénicas valencianas intentando aportar respuestas a los problemas con los que se encuentran los creadores o artistas para poder llevar a cabo sus propuestas o darlas a conocer». Con este mismo objetivo, Projecte Inestable y Rambleta «mantienen desde hace años una estrecha colaboración, de la que han surgido también proyectos como ‘Graners de Creació’, que apoya la creación valenciana, aunando esfuerzos y creando sinergias con la mirada puesta en el futuro, y al que se han sumado numerosas salas e instituciones; así como con el certamen de textos teatrales ‘ACoTaciOneS en la caja negra’ que respalda la escritura, el talento y la dramaturgia». 

En L’Odissea de les nostres vides, el autor pone en el punto de mira su trayectoria familiar y profesional para representar la ausencia del padre a través de un segundo relato que funciona como hilo conductor: el libro de La Odisea de Homero. La obra cuenta la historia de redención de un hombre blanco occidental, obsesionado con La Odisea. Un hombre que se ahoga en un mar plagado de guerras y muertes. Un Ulises que irá presentando su especial redención por todos los conflictos que han causado sus acciones. Pero, en paralelo, un tercer relato recorre el espectáculo: la Historia patriarcal y de dictadores frente a las verdaderas víctimas, los anónimos.

Jacobo Pallarés durante uno de los ensayos

Jacobo Pallarés durante uno de los ensayos / Urban

«Al final esto no habla de mí, ni de héroes, ni de los nombres que se quedan en la Historia… esto habla de los que se quedan encallados, de los olvidados, de los anónimos que somos más que los de arriba», explica Jacobo Pallarés. «Hablamos de los que se quedan en la cuneta, de los que esperan a que cesen las bombas, de las Penélopes que han esperado 20 años, de las que esperan y tejen, y construyen y hablan y viven aunque una historia patriarcal haya dominado. La obra habla de que ya es hora de no esperar», afirma el autor. El personaje de Ulises representa al héroe de guerra, al depredador, hacia una crítica a la imagen mitológica positiva que ha perdurado en las civilizaciones posteriores. 

En cuanto a la puesta en escena, el espectáculo aproximará, como en otras creaciones de la compañía, a parte del público al escenario. También hará partícipe a todo el público a través de la aplicación Mentimeter que propondrá preguntas y respuestas en el desarrollo de la pieza. Por otro lado, tal y como Pallarés venía haciendo en las tres piezas anteriores de su trilogía sobre la casa (Family(es), L’Aniversari y El rastre d’aquella nit), se recupera el maquetismo en escena, la manipulación de objetos a diferentes escalas, con una apuesta por un lenguaje audiovisual con proyecciones y cámara de vídeo en directo como canal para contar el relato. Además, la creación en escena es el punto de partida de la dramaturgia, a cargo de los intérpretes y de los diferentes performers, entre los que se encuentra el propio autor. 

Juan y Lucía, durante el ensayo

Juan y Lucía, durante el ensayo / Urban

Para llegar a aquí, L’Odissea, de les nostres vides ha contado con el trabajo de un equipo numeroso de creadoras y creadores. «Cuando llevas veinticinco años trabajando en escena crees que todo es fácil. Pero todo proceso artístico te requiere piel, huesos y entrañas. Y es distinto y te embarcan miedos, monstruos y miles de posibilidades distintas», cuenta Pallarés, quien concluye: «Cuando trabajamos con este tipo de procesos creativos tan abiertos, expuestos a la creatividad incesante de un equipo numeroso y comprometido ves lo maravilloso del arte: la necesidad de decir algo, de posicionarse y no callarse y de negociar con todas las partes creativas para componer un espectáculo que sea de todas y que no sea de una única persona».

En este sentido, el estreno de la última creación de Teatro de lo Inestable cuenta con la interpretación de Lucía Poveda Sifre y Juan Andrés González, quien también firma la dramaturgia junto al autor. Al equipo técnico y artístico se suman: Vickyleaks en la música; Aurora Diago, en videoprogramación, técnica de escena y performance; Beatriz Herráiz y Camilo Cogua en animación y videocreación; el diseño y creación del espacio escénico a cargo de Los Reyes del Mambo y Mireia Parreño en el diseño de iluminación, entre otros.