El Valencia arranca el mes de marzo, ese de la fiesta fallera, con una jornada en la que puede marcar sus verdaderas pretensiones de cara al final de la temporada. Y que, además, sirve de «calentamiento» de cara al trascendental partido del próximo sábado ante el Atlético de Madrid. Pero hoy, justo dos horas antes de que los cohetes hagan vibrar la plaza del Ayuntamiento en la primera mascletà, el equipo se verá las caras con uno de los conjuntos que más se le resisten en los últimos tiempos como es la Real Sociedad.

El técnico portugués puede presumir de que, a estas alturas de la temporada, cuando más miedos suele haber por sanciones y lesiones, el grupo está por completo a su disposición, con la salvedad de Paco Alcácer, que ayer también entrenó al margen de sus compañeros para recuperarse de su lesión en la rodilla derecha.

Tal vez esta, y el hecho de que, actualmente el equipo depende de sí mismo para entrar en Liga de Campeones, sean las noticias más positivas de cara a este duelo contra la Real Sociedad que, dados los antecendentes —no se les gana desde 2011— siempre genera inquietud entre las filas blanquinegras. Más aún teniendo en cuenta que, a pesar de que todavía no conoce la victoria lejos de su estadio, la Real Sociedad se ha especializado este año en poner en apuros a los de arriba, así, ya ha vencido al Sevilla, en la jornada pasada (4-2), además de al FC Barcelona (1-0), Atlético (2-1) y Real Madrid (4-2).

Tras la jugada de «despiste» de la semana pasada de Nuno cuando no solo dejó fuera a Negredo del once, sino que optó de inicio con De Paul en punta y Rodrigo de interior derecho, es complicado anunciar con rotundidad los planes del entrenador. Más aún con la tendencia a entrenar a puerta cerrada. Aún así, durante la semana se ha trabajado en punta con un grupo formado por Piatti, Feghouli y Negredo. Que fue la tripleta que finalizó el partido ante el Córdoba en unos minutos donde el equipo demostró que no se rendía y que quería la victoria, que lograron con el gol de Piatti.

Con el regreso de Barragán, el gran estado de forma de Gayà y la titularidad casi indiscutible de Mustafi y Otamendi, así como la de Diego Alves en portería, parece que la única duda más podría ser si el portugués apuesta por dar continuidad en el medio a Javi Fuego, Parejo y André Gomes, o, dados los problemas físicos que arrastraba este último, opta por incorporar a Enzo Pérez.

La Real, necesitada

El equipo donostiarra llegaba a esta jornada a cinco puntos del descenso y a 17 de una Liga Europa para la que sí se clasificó la pasada temporada. Está, por tanto, en riesgo de entrar en puestos de peligro, pero también en otro que es quedarse muy pronto en tierra de nadie. Como le pasa a Nuno, David Moyes tampoco puede contar con un delantero importante como es Carlos Vela. Pero esto, lejos de lastras la capacidad ofensiva de los vascos, parece que les ha llevado a dividirse la responsabilidad. Así, marcan más desde la lesión de menisco del mexicano. Especial atención habrá que tener a los Xabi Prieto, Agirretxe, así como al ex valencianista Canales que llega con ganas.