Hay pequeños detalles que significan mucho. Cuando en el minuto 1 de partido, el Valencia CF estiró sus lineas para presionar la salida de balón de la Real no era una situación que se dio en el partido. Sin más. Todo estaba estudiado. Uno de los puntos fuertes del cuerpo técnico se centra en el gran conocimiento del rival, a base de diseccionarlo „como hacen todos los clubes de élite„ y de trabajar a diario pensando en él, situación que ya no es tan común. ¿Un club grande se siente pequeño si amolda su juego al rival? Es un debate que puede necesitar mucha tinta, pero Nuno le da gran importancia porque obtiene resultados. Sentirse capaces de competir ante cualquiera no significa que dejes de prestarle atención al que vas a tener enfrente.

Hay futbolistas en el vestuario que tienen la sensación, a diferencia del anterior técnico Juan Antonio Pizzi, que ahora se valora más a los adversarios para definir el camino a seguir hacia la victoria. Si uno rescata los resultados del argentino observa que ganó al Barça en el Camp Nou, empató ante el Real Madrid en el Bernabéu o en el Pizjuán, y sólo se perdió con el que acabó siendo campeón de liga, el Atlético, en Mestalla. Se prepararon muy bien estos partidos, pero luego falló ante rivales a los que tenía que ganar. Como si ante los rivales pequeños, al ser mejores sobre el papel, ibas a ganar porque sí. El actual Valencia CF ha perdido partidos, como el de Riazor o ante el Levante UD, que debía ganar, pero nunca fue por relajarse en el estudio del adversario, con la implementación sobre el césped que ello significa. Podrá salir mejor o peor, pero el cuerpo técnico le da mucha importancia a esos pequeños detalles que pueden ser definitivos.

Los despachos de la Ciudad Deportiva son los grandes conocedores del tiempo que le dedican Nuno y sus ayudantes a desmenuzar al rival, en partidos como el de ayer en Mestalla se observa un trabajo detrás que no puede pasarse por alto tras firmar una nueva victoria, que lleva al Valencia CF a caminar a una velocidad de crucero, a ritmo de récord de puntuación. La solvencia que plasmó sobre el césped el conjunto blanquinegro no podía verse empañado con un desliz en el marcador, sobre todo por la pobre aportación ofensiva de la Real Sociedad. Si no es una cuestión de errores en la definición, es por haber logrado frenar sus virtudes. De ahí la importancia de su estudio.

Acabados los primeros 25 capítulos de liga, nunca en la historia habían sumado tantos puntos a estas alturas, ni antaño cuando se contabilizaban con dos puntos los triunfos en lugar de los tres actuales. El objetivo no es otro que superar en la segunda vuelta los 38 puntos apuntados en la primera. No va a ser una labor sencilla, pero en el vestuario se respira optimismo porque el Valencia CF no está bajando el pistón. Con esto nadie puede ni debe pensar en que van a ser invencibles, pero Piatti ejemplifica lo que es el equipo: trabajo y más trabajo hasta alcanzar los resultados.

Mientras se debatía de forma estéril si el 1-0 se lo apuntaría el árbitro a Ansotegi o a Piatti, el «Duende» ya había cerrado el partido con su segundo gol. Y con los tres puntos se suma un punto más que en los mismos partidos de la primera vuelta. Nadie duda de que este equipo va a ir a más, sobre todo si Nuno es capaz de mantener el nivel competitivo de un grupo que no se pone límites.