No es la primera vez que en el Valencia CF cuentan con Eliaquim Mangala? y se quedan sin su firma. Ocurrió en el verano de 2011 cuando Braulio Vázquez decidió apostar por él, se alcanzó un acuerdo con el Standard de Lieja por 4,5 millones de euros más una cantidad variable y la cesión de Nacho González. Sólo unas horas después de cenar en Lieja con su representante y su madre, ya con los contratos redactados para la firma, una llamada del ex vicepresidente del club Luciano D´Onofrio lo cambió todo, dejando plantado al Valencia CF.

El que fuera dirigente del club le convenció a él y a Defour para recalar en el Oporto, dada su amistad con el presidente Pinto Da Costa. Mangala no llegó ni a responder al teléfono móvil, y el conjunto luso pagó siete millones de euros, sólo tres años después, el Oporto le traspasó al Manchester City por 40 millones. A la Dirección Deportiva valencianista le tocó volver a reaccionar, pero ya con la necesidad pública de incorporar a un central, los clubes les esperaban reclamando cantidades importantes de dinero. Llegó Víctor Ruiz procedente del Nápoles por 8´5 millones de euros, jugador indiscutible en la selección Sub´21 y con proyección para dar el salto a la Absoluta. Su gran inicio de curso que llevaron a Del Bosque a valorar su citación con la Roja no tuvieron continuidad, intermitencia que le acabó llevando al Villarreal CF.

La situación ahora ha tenido ciertas similitudes, puesto que tras llegar a un acuerdo verbal con el Manchester City para su cesión, el defensa no quiere dejar el club. Conscientes de su potencial, Begiristain no quería desprenderse del futbolista pero veía con buenos ojos una cesión que se antoja muy complicada.