El partido se sabía que iba a ser complicado por la trayectoria mostrada por el equipo en las últimas jornadas. El ambiente enrarecido sólo se solventaba con una victoria. Y al final el Valencia pudo conseguir los tres puntos en liza y calmar un tanto la situación de estrés que parece vivir el equipo. Los puntos le van a dar aire y tranquilidad para intentar solventar los próximos encuentros. Hubo sufrimiento durante el partido porque el resultado era ajustado y el Granada apretó hasta el final. El pitido final fue un respiro para los aficionados valencianistas.
El Valencia afrontó el partido con un 1-4-4-2 con Jaume en la portería, Cancelo y Orban en los laterales y Mustafi y Vezo como centrales; en el centro del campo Parejo y Enzo por el centro y Feghouli y Bakkali por los extremos; delante los dos delanteros internacionales del Valencia Negredo y Alcácer. Frente a ello el Granada opuso un 1-4-3-3 buscando posesión y salidas rápidas por los extremos. En los primeros compases fue el Granada el que tuvo un mayor control del juego porque la superioridad numérica en la parcela central se imponía a los centrocampistas del Valencia, que no acababan de encontrar la ayuda de sus jugadores exteriores ni la ayuda de uno de los dos puntas. El Granada pudo inaugurar el marcador con acciones de Success y de Javi Márquez que detuvo bien Jaume. La pegada que no tuvo el Granada en esas acciones la tuvo el Valencia, Cancelo abre a Bakkali y su preciso centro es rematado de cabeza por Mustafi al fondo de la red. Era el 1-0, que a la postre sería definitivo. Al filo del descanso una falta lanzada por Rochina propició la parada de la noche de Jaume que se estiró y logró desviar el balón que iba perfectamente dirigido. La primera parte terminó con la victoria valencianista y con buenas pinceladas a nivel individual de Bakkali, muy activo y eléctrico con buenas acciones individuales y lanzando buenos centros hacia sus compañeros. Mustafi estuvo también a muy buen nivel y además del gol demostró que es el autentico káiser en la defensa valencianista. Jaume en un par de ocasiones también fue uno de los baluartes para que el marcador del Granada se quedara en cero goles.
La segunda parte fue algo más igualada y el Valencia por momentos parecía que estaba más entonado, tenía algo más el balón, y se sucedieron varias ocasiones de gol por mediación de Alcácer, de Enzo Pérez con un gran disparo que salió fuera por poco, de Feghouli y al final de Rodrigo que tiró y Andrés Fernández detuvo con seguridad. El Valencia no sufrió tanto en defensa y estaba más agrupado y defendía con más solidez. Sólo al final el Valencia lo pasó mal más por lo raquítico del resultado que por la sensación de peligro que ofrecía el Granada. Muy romo en la faceta ofensiva.
En esta segunda parte destacaría por parte del Valencia la buena proyección ofensiva que mostró Cancelo por parte derecha siendo un puñal que intentaba siempre llegar al área del Granada. Mustafi volvió de nuevo a ser ese jugador sólido, y cuajó a mi entender una gran actuación que culminó con ese gol que suma tres puntos tan necesarios. El partido era complicado para los jugadores del Valencia por el nerviosismo que pudieran tener pero lo sacaron adelante. Era lo más importante. El juego siguió dejando dudas pero siempre se puede mejorar mejor desde las victorias. El Granada era un rival propicio pero hoy no hay rivales pequeños y el Valencia al menos le puso empeño y corazón. El equipo jugó a trompicones y a veces se notó cierta descoordinación entre las diversas líneas del equipo. Hay que mejorar desde el esfuerzo y teniendo una mayor clarividencia en el juego pero logró los tres puntos que tanto necesitaban.
