Con tres «fichajes» del filial blanquinegro (Sito, Ayala y Ray) el Valencia CF realizó la última sesión de trabajo antes de desconectar dos días, entrenamiento del que se ausentó por unos motivos personales el técnico Nuno Espírito. Con Rui Silva y Phil Neville al mando, se preparó un partido en espacios reducidos donde Antonio Barragán dio el susto. Los técnicos quieren que se entrene con intensidad, y en una internada del lateral andaluz recibió un golpe involuntario de Lucas Orban, pero tras ser atendido unos minutos, pudo continuar.

En ningún momento hubo mala intención, pero sí fue producto esa acción de la seriedad con la que se tomaron los presentes la última sesión de la semana a pesar de que no peleaban por un puesto en el once titular. Antonio, que no ha jugado los últimos cuatro partidos, sabe que es en el día a día donde debe «pedir» su regreso a la titularidad, de ahí que a pesar de ser atendido del golpe en el tobillo „la sensación inicial era que podía tener una lesión de gravedad por los gestos de dolor que hacía„ quiso volver. Fueron diez minutos en los que necesitó que le tratasen, con Orban muy pendiente de él, autor de la acción.

En un partido de nueve contra nueve, no hubo dos equipos claramente definidos y se iban realizando variaciones en ambos. Ante la falta de los internacionales aún era pronto para atisbar el posible once que se enfrenta al Málaga el próximo sábado.