Dos semanas sin partidos y con un trabajo más encaminado al apartado psicológico que al futbolístico culminaron ayer con un almuerzo colectivo de la plantilla del Valencia, del que salió una conjura, decidida y entusiasta, de reaccionar inmediatamente y enterrar de forma definitiva el dubitativo arranque de campeonato.

La cita, al calor de viandas argentinas, fue en un céntrico restaurante de la ciudad y fueron los nuevos fichajes de esta temporada „Abdennour, Mathew Ryan, Santi Mina, Danilo Barbosa, Aderllan Santos y Zakaria Bakkali„ fueron los encargados de pagar la comida.

El ambiente vivido en el almuerzo fue de plena confraternización y por momentos los gritos y las risas eran audibles desde el exterior. Del encuentro se salió con un claro propósito: la reacción del equipo es imperativa y debe producirse ya, a corto plazo. La reflexión extendida dentro de la plantilla es que, cuanto antes, se debe revertir la dinámica irregular de este inicio de curso ya que el camino más corto para repetir participación en la Liga de Campeones „objetivo primordial para el modelo de negocio y el prestigio deportivo de la entidad„ pasa por volver a entrar entre los cuatro primeros clasificados del campeonato doméstico.

Un desafío para el que se necesita una regularidad en los resultados y en el juego que todavía no se ha alcanzado. Como prueba, en las 7 primeras jornadas de Liga sólo se han ganado dos partidos y se han perdido otros tantos, cuando la temporada anterior el número de derrotas sólo fue de cinco y las victorias rozaron el 60 % de los partidos totales. El equipo quiere lamerse las heridas del duro golpe emocional que supuso perder en Bilbao en la última jornada. La clara derrota en San Mamés dolió especialmente porque cortaba de raíz una incipiente racha que ganaba cuerpo después de encadenar dos victorias contra el Granada y el Olympique de Lyon.

Pleno en la comida

En el almuerzo hubo pleno de asistentes. Acudió todo el equipo, el cuerpo técnico encabezado por Nuno Espirito Santo y los empleados del club vinculados al primer equipo. La intención inicial era la de celebrar el almuerzo este pasado martes, pero se aplazó porque quedaban por venir algunos internacionales y se quería que nadie faltase para sellar el compromiso común por la reacción del equipo.

En el propósito de mejoría del Valencia se cruza un calendario exigente. En las próximas semanas el equipo definirá su futuro en la Liga de Campeones con el doble enfrentamiento contra el Gent. En caso de sumar los 6 puntos quedaría prácticamente encarrilado el pase a octavos de final, con el espaldarazo de moral que supondría. Además, en la Liga, tras librar el encuentro contra el Málaga, se visitará a un rival directo como el Atlético de Madrid y se recibirá en casa al Levante UD, en un derbi siempre intenso.