La derrota de ayer en la Copa del Rey por 7-0 ante el FC Barcelona recuerda una de las páginas más tristes de la historia del Valencia CF: Karlshuer. Pronunciar el nombre da terror. Sucedió en la temporada 93-94, y fue la mayor humillación europea en casi cien años de historia. Aquel partido fue el principio del fin de un presidente, Arturo Tuzón, y de una generación de grandes futbolistas que nunca ganaron un título en Mestalla.

El Valencia CF llegaba como flamante líder de la Liga a Alemania. Había euforia por la victoria en casa ante el Celta, y el fútbol preciosista que realizaba el equipo de Guus Hiddink. En aquel once había nombres ilustres como los de Pedja Mijatovic, fichaje estrella de la temporada, y la ilusión del valencianismo estaba tan desbordada que en viaje del equipo a tierras germanas incluso un directivo de la entidad Pepe Péris Frígola, se dedicó a cortar jamón en el avión.

Lo que posteriormente sucedió en el terreno de juego fue un drama. Y eso que el Valencia CF comenzó muy bien el partido de vuelta „llegaba con ventaja en la ida de 3-1„ , y al descanso se llegó con absoluta confianza en pasar la eliminatoria de la Copa de la UEFA. Pero el Karlsruher apuntilló al Valencia CF con siete goles como los que ayer le endosó el Barça,a los de Gary Neville, y Guus Hiddink no tardó en ser cesado. Aquí comenzó el calvario de Arturo Tuzón, y el oportunismo de Francisco Roig para llegar a la presidencia de la entidad. Fue un año oscuro en la historia del valencianismo.

En la Liga, y marcado por aquella tragedia futbolística, el Valencia llegó al final del campeonato sin opciones. El conjunto valencianista visitaba en Riazor a un Deportivo que se jugaba la Liga con el FC Barcelona ,y que dependía de sí mismo para ser campeón del torneo doméstico. El final de aquella historia ya es conocido por todos. Con aquel penalti fallado por Djukic.

Otras derrotas históricas nos llevan a los años cuarenta. El Valencia CF perdió 10-3 contra el Sevilla, un resultado humillante, y en el año 1955 otro marcador escandaloso fue el 7-0 que logró el Alavés ante un Valencia de triste recuerdo.