La mutación del Valencia CF en los instantes finales de la primera parte y, sobre todo, en los inicios del segundo tiempo, fue decisiva para explicar la victoria del equipo de Gary Neville ayer ante el Málaga (1-2). El equipo valencianista no comenzó bien, cometiendo muchos fallos y carentes de buen juego, pero conforme pasaron los minutos se vio como el Valencia CF se fue a por el partido hasta que logró la victoria. Se supo reponer a un gol tempranero y eso habla muy bien del once de Neville. Estas son las claves del choque:
De salida lastran los errores y las imprecisiones
El Valencia CF comenzó el partido perdiendo numerosos balones. Esa suma de errores e imprecisiones lastraron el juego del equipo de Neville. Sin presión en el centro del campo, el Málaga creaba superioridad en esa parcela , y dando balones al rival, es muy complicado no sólo mantener tu portería a cero sino incluso atacar. En ese sentido, los fallos en la entrega, los pases al contrario, y la falta de concentración, acabaron costando un gol tempranero obra de Cop.
Al Valencia CF le falta fútbol por dentro
El principal problema ofensivo del Valencia CF es que no tiene fútbol por dentro. A la hora de atacar, su juego se limita a las bandas, no veo ninguna pared ni nadie se ofrece por el centro, y el juego se convierte en muy previsible así como falto de profundidad. Al equipo le falta ese futbolista tipo Silva o Aimar que pueda darle una buena salida ofensiva al equipo, un último pase, meta un balón por dentro al punta o, incluso, marque goles. Sin ese jugador, todo el fútbol es por las dos bandas. Tan sólo el argelino Feghouli se ofrece algo por esa parcela. Pero tampoco es decisivo.
El equipo buscó el empate y lo encontró
El Málaga se encontró con un gol muy pronto y, pese a que jugaba en casa, se metió atrás muy rápido. El equipo de Gracia le dio el balón al Valencia y pasó a jugar al contragolpe. Y, quizás, ese fue su error. Porque el Valencia CF se fue a por el empate y lo encontró. La verdad es que el tanto llegó en un error Kameni. Porque el fallo que comete el guardameta del Málaga no se explica. Aunque Cheryshev le pisara. No se explica. Pero, aún así, el Valencia tuvo justo premio al hecho de haberse ido a por el empate. Su fútbol no fue bueno, pero igualó el marcador.
Una muy buena segunda mitad decide el encuentro
En la segunda parte, el Valencia CF terminó por hacerse dueño del partido. Salió muy metido. Enganchado. Porque los de Neville se fueron a por el partido y encontraron pronto el el segundo gol. En una rápida acción de André Gomes, en la que impuso su calidad y visión de juego, mandó un precioso balón entre líneas para la llegada en carrera de Cheryshev quien batió a Kameni por segunda vez. Incluso el ruso pudo marcar el tercero a pase de Alcácer.
