Ha llegado el momento de hablar de fútbol. De pensar en fútbol. Y de planificar la próxima temporada. El Valencia CF pondrá este viernes ante la Real Sociedad punto final a una mala campaña, y no puede perder ni un solo minuto en trazar un nuevo rumbo deportivo. Por el club y por sus aficionados.
Es cierto que las iniciativas de la entidad a las que estamos asistiendo son plausibles, organizar actos, eventos y jornadas de diversa índole, pero todavía más cierto es que no se puede desviar la atención de lo que verdaderamente importa y lo que da sentido a un club como el Valencia CF: El fútbol.
Ha llegado el momento de que la pelota sea el centro sobre el que gravita el resto del club. La faceta deportiva es, sin lugar a dudas, la más importante dentro de la entidad. Y no se puede descuidar. En un club nos encontramos distintos departamentos como el económico, marketing, comunicación, social... Pero el más importante, el vital, es el deportivo. Si éste último funciona, el resto se beneficia.
Cuando hablo de la faceta deportiva no sólo me refiero al primer equipo, y a saber quién será el nuevo entrenador o los fichajes de la próxima temporada, sino a una estructura moderna, organizada, trabajada y con gente competente desde el primer equipo hasta las categorías inferiores. La base es el futuro. Y se debe cuidar la cantera con un mimo especial.
Toda la estructura importa. Y debe estar formada con técnicos cualificados y con dilatada experiencia profesional. Un club como el Valencia CF obliga a tener a los mejores, a los que más éxitos deportivos han logrado, y a los mejor preparados. El primero de ellos, sin lugar a dudas, es el director deportivo. Rodeado de gente que le ayude.
Lejos de hablar de si este jugador es de Lim, Mendes o de Suso, hay que hablar de que el futbolista pertenece al Valencia CF. Porque su buen rendimiento será beneficioso para el equipo, su directiva, y su afición. Es momento de aunar esfuerzos, de colaborar y de ayudar por el bien de todos. Evitemos el enfrentamiento. No beneficia a nadie. Estoy convencido de que tanto Lim como Mendes o Suso quieren que el Valencia CF logre los mayores éxitos deportivos.
Pero no sólo ellos. Antes hablaba de que si la parcela deportiva funciona con precisión, el resto de parcelas se beneficiará. El caso del marketing, por ejemplo, ya que se podrán lograr más y mejores patrocinadores debido a una mejor valoración de los futbolistas. O será mucho más elevado el caché del equipo a la hora de disputar un partido amistoso. También si el equipo va bien se podrá firmar a jugadores que, a día de hoy, se plantean llegar a Mestalla porque no se va a jugar la Liga de Campeones la próxima temporada. Sin Europa, el proyecto no es tan atractivo. Y por eso hay que encontrar la fórmula para que el Valencia CF pueda contar con los mejores o con los que mejor rendimiento puedan ofrecer.
Hablemos de fútbol. Volvamos a dar el protagonismo que la pelota merece. Que el club se mueva, sí, pero no olvidemos ni descuidemos lo que realmente es lo importante: El juego. Planifiquen una buena temporada 2016-2017, que eso es lo que va a hacer que todos se sientan orgullosos de pertenecer a un equipo como el Valencia CF.
