El Valencia gana tiempo y no tendrá que hacer frente de forma inmediata a la multa de 23´3 millones de Bruselas. El Tribunal de la Unión Europea aceptó el pasado jueves las argumentaciones legales presentadas por el club de Mestalla, por lo que se paraliza la obligación de cobro de la millonaria sanción. De esta manera, el Valencia no deberá realizar desembolso alguno, al menos hasta que el Tribunal de Luxemburgo resuelva en las próximas semanas si concede finalmente la petición de suspensión cautelar de la citada multa.

Esta primera cautelarísima es una doble victoria para el Valencia. Primero porque la entidad gana tiempo, todo un balón de oxígeno para hacer frente a una multa que considera desproporcionada y que, además, no dispone de dinero para pagarla. Además. El Valencia entiende, por otro lado, que con esta primera medida cautelar queda probado que el club «tiene base legal en su reclamación ante la Comisión Europea», por lo que ve aumentar sus posibilidades para acabar limitando el impacto definitivo de la sanción.

Este espaldarazo no es suficiente para el Valencia. La entidad presidida por Layhoon Chan insistía en el comunicado emitido ayer en recibir un respaldo explícito, y no únicamente en sus declaraciones públicas, por parte de la Generalitat Valencia. El club reconoce que la predisposición del Consell presidido por Ximo Puig es «positiva», pero que debe ir más allá de los gestos. Concretamente, se le reclama «que intervenga y coadyuve legalmente en el recurso, de modo formal, ante el Tribunal de Luxemburgo» para posicionarse «con rotundidad y apoyar los argumentos del Valencia ante la decisión inicial de la Comisión, ahora suspendida de forma cautelar». En otras palabras, el Valencia espera un informe jurídico de la Abogacía de la Generalitat para adherirlo al recurso ya presentado en el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 5 de Valencia para lograr paralelamente que la justicia de España acepte la suspensión cautelar de la multa. Para ello, el Valencia ha avalado el pago del montante de la multa presentando como garantía el activo inmobiliario del nuevo estadio.

Se desbloquea el mercado

La amenaza del pago inmediato de los 23´3 millones de euros embargaba, asimismo, las posibilidades económicas del Valencia para acudir al mercado de invierno. La decisión del Tribunal de la Unión Europea supone el primer paso necesario para poder fichar, pero deberá verse confirmada con la suspensión cautelar. La multa propuesta por la comisión de Competencia de la Unión Europea tiene su origen en la concesión de avales públicos en 2009 para que la Fundación del Valencia pudiera acceder al préstamo de 72 millones de euros de Bankia con el que completó la ampliación de capital para convertirse en máxima accionista de la entidad. El 14 de octubre la UE concretó que la multa de 23´3 millones debía abonarse antes del 6 de noviembre.