Varios miembros de una de las dos charangas contratadas por el Valencia, para animar en Mestalla durante el partido de ayer ante el Málaga, fueron agredidos antes del encuentro. Supuestos aficionados radicales del club valencianista esperaron al grupo de animadores en las inmediaciones del estadio. Una vez localizados, los presuntos ultras del Valencia se acercaron y les intimidaron, antes de quitarles material musical y romperlo.

Los hechos ocurridos cerca del estadio están contextualizados en la tensión que vive la grada de animación Curva Nord con el Valencia, después de que la entidad decidiese este verano dejar fuera de ese grupo a los mayores de 30 años. La decisión irrevocable del club está argumentada en la finalidad de la grada de animación, destinada a gente joven que se ve beneficiada de un importante descuento en el abono.

Con menos miembros en sus filas, la Curva Nord, grupo en el que la Peña Yomus tiene una presencia muy relevante, la animación ha bajado considerablemente desde esta parte de la grada durante esta temporada. Para compensar el descenso de cánticos de animación, el Valencia consideró oportuno contratar a charangas para que el ambiente en las gradas no decaiga. Una postura que no ha gustado nada, al parecer, a los miembros de la Curva Nord, cuyas relaciones con el club se han deteriorado significativamente en los últimos meses.

Antes del partido, hubo concentración de un centenar de aficionados en la avenida de Suecia, una hora antes del inicio del encuentro, la mayoría pertenecientes a la Curva Nord. Se mezclaron los cánticos de ánimo al equipo con otros más críticos, relativos a la problemática mencionada.

Minuto de silencio por Rita

Mestalla rindió un minuto de silencio en recuerdo de la exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá. Un homenaje que, como el resto de estadios del mundo, también se hizo extensivo para solidarizarse con la tragedia del Chapecoense. Además los jugadores llevaron un brazalete verde, el color de la malograda escuadra.