En la cafetería-sala de trofeos del campo municipal de Martigny, donde atendió a los medios de comunicación desplazados a Suiza, Mateu Alemany habló de que el Valencia estará en disposición de hacer fichajes cuando se produzca «el agujero» en el apartado de las ventas. Ese alivio financiero puede venir vía Ezequiel Garay. El central argentino, como informó Superdeporte, maneja ofertas muy cuantiosas para el Valencia procedentes de la Premier League. De momento, Garay, de 30 años, es el único central que entra plenamente en los planes de Marcelino García Toral, pero una oferta millonaria podría cambiarlo todo.

Jorge Mendes, representante del defensor argentino, trasladó al club de Mestalla que manejaba proposiciones de la liga inglesa por un valor de 25 millones de euros. Una suma que el Valencia aceptaría encantado, ya que saciaría su necesidad financiera y daría «cash» para completar los fichajes que tanto ansía Marcelino.

La pelota está en el tejado de Garay, al que se le abre todo un dilema. Dos son los argumentos que condicionan su decisión final: familiares (su esposa, la televisiva Tamara Gorro, prefiere quedarse en Valencia), así como la procedencia de las ofertas, tanto por el potencial del club como por la ciudad en la que residiría.

Una eventual marcha de Garay obligaría al Valencia a firmar un mínimo de dos centrales, y oxigenaría las cuentas para satisfacer las consabidas peticiones de Marcelino: un mediocentro defensivo y un extremo de banda izquierda.

Alves, cuatro años al Flamengo

Quien sí parece que va a salir es Diego Alves. El portero brasileño está ultimando un acuerdo por cuatro temporadas con el Flamengo. Si durante el fin de semana no se completase un acuerdo, circunstancia poco probable, estaría obligado a volver a la ciudad deportiva de Paterna el lunes, fecha en la que está convocado para reincorporarse junto a Joao Cancelo y Vinicius Araujo.

Por otro lado, el Valencia hizo ayer oficial la cesión de Zakaria Bakkali al Deportivo de la Coruña. El extremo belga jugará un año cedido en el club de Riazor, que asumirá su ficha pero no dispondrá de opción de compra. A peaar de ser público el acuerdo, Bakkali completó la doble sesión de entrenamiento, física por la mañana y partidillo por la tarde, en Évian-les-Bains. Curiosamente, fue uno de los más de destacados.Por último, Santi Mina trabajó con los fisioterapeutas en el hotel de concentración, por una sobrecarga en el muslo derecho. Al acabar la sesión, toda la plantilla, cuerpo técnico y empleados posaron para una foto final de pretemporada.