El Valencia CF tiene muchos frentes abiertos que no terminan de cerrarse. El más acuciante ayer fue el traspaso del central argentino Ezequiel Garay, de 30 años, al Spartak de Moscú. La operación baila entre los 20 millones que ofrece el club moscovita y los 22 que exige el director general del VCF, Mateu Alemany (eso fue lo que pagó en verano pasado el Valencia al Zénit).

El jugador tampoco había llegado ayer a un acuerdo sobre su contrato con la entidad rusa. En caso de marcharse el defensa argentino, el Valencia trataría de contratar al brasileño Gabriel Paulista, del Arsenal, que ya trabajó con Marcelino cuando coincidieron en el Villarreal. Gabriel, de 26 años, apenas ha jugado en los últimos meses debido a las lesiones, pero es un defendero muy rápido y que ya conoce los métodos de Marcelino.

El representante de Garay, Jorge Mendes, estuvo en València el pasado jueves un par de horas y también hizo saber al club de Mestalla de la intención de Cancelo, otro de sus representados, de dejar el Valencia. El seleccionador portugués, Fernando Santos, le ha comunicado a Cancelo que solo lo convocará si juega de lateral derecho. En esa posición fue titular cinco partidos consecutivos.

Quien menos cobra

El técnico del Valencia, Marcelino García Toral, solo lo quiere de extremo. De ahí el deseo de irse del futbolista, que es además uno de los que menos cobra de la plantilla (600.000 euros brutos por temporada).

Cancelo tiene varias ofertas y una muy interesante para él es la de la Juventus de Turín, que busca un lateral después de la fuga de Dani Alves al PSG. El Valencia, en cambio, pretende que el jugador luso siga una temporada más en Mestalla, explote a las órdenes de Marcelino y pueda ser traspasado por mucho más dinero al final de la campaña que viene. Cancelo también entiende que ha habido algunas promesas incumplidas por parte de la sociedad de Mestalla que le invitan a buscarse una salida lejos de València.

Kondogbia ni se entrena

Los dos jugadores del Inter pretendidos por el Valencia, el central colombiano Murillo y el mediocentro defensivo francés Kondogbia, no han entrado en la convocatoria del técnico neroazzurro, Luciano Spalletti, que se enfrenta hoy al Betis. Señal de que el Inter ya los da por perdidos habida cuenta del acuerdo total de ambos jugadores con el club de Mestalla. En el caso de Kondogbia, ni siquiera salió ayer a entrenarse a La Pinetina, el campo de entrenamiento del Inter. «Él quiere un cambio», declaró ayer Spalletti respecto a Kondogbia, «traté de convencerle para quedarse, pero parece que alguien le ha prometido más cosas (en alusión al Valencia)». Es decir, Spalletti admite que es una batalla perdida y que Kondogbia acabará jugando en el club de Mestalla.

El Valencia ha dado a entender que tiene cerrado a Jeson Murillo, un central rápido y contundente, de 25 años, internacional con Colombia, por unos 13 millones de euros. Más complicada es la llegada de Kondogbia, de 24 años, puesto que el Inter pagó 35 millones por él al Mónaco hace dos temporadas. De ahí la presión del internacional francés para abandonar el Inter con la rebeldía de negarse a entrenar en la sesión de ayer.