Como si de un ruidoso y ocupado bazar se tratara, el mercado de fichajes hierve en sus últimas 24 horas antes del cierre. El Lazio ha hecho oficial hoy la incorporación de Luis Nani, el atacante portugués del Valencia CF que llega al club italiano cedido con una opción de compra de 10 millones.

A primera hora de la mañana Nani voló a la capital italiana, donde este mediodía ha pasado con éxito la revisión médica con la Lazio, a pesar del esguince de rodilla que ha arrastrado en la pretemporada y por el que aún no podrá actuar hasta dentro de dos o tres semanas.

Otro objetivo prioritario del equipo de Mestalla es también dar salida, a toda costa, a Orellana. Marcelino no lo quiere ver ni en pintura y quiere dejar hueco en el vestuario para poder fichar, si se tercia, un delantero. A las llegadas de dos hombres de banda, Pereira y Guedes están a la espera, el técnico ha insistido en que se valore la opción de incorporar a un punta para completar la plantilla.

Sin embargo, más que en llegadas, el Valencia CF trabaja en las salidas. Jugadores como Orellana, Medrán o Vinícius tienen a sus representantes a la espera de dar el visto bueno a una propuesta atractiva.

Anoche, las dos negociaciones más avanzadas en el club de Mestalla eran las de Orellana y Medrán, rumbo al Getafe y Alavés, respectivamente. El chileno quiere jugar en el Coliseo esta temporada, pero el Getafe se muestra reticente a la hora de pagar la totalidad de la ficha. El Valencia considera de lógica que el club madrileño asuma el sueldo del jugador. Ahí radica el tira y afloja. El Leganés habría mostrado su interés en Orellana, incluso estaría dispuesto a mejorar las cantidades que ofrece el Getafe, pero el futbolista habría tomado la decisión de jugar en el Coliseo.

Con respecto a Medrán, el Alavés quiere la cesión del centrocampista. Le urge un organizador. Las negociaciones están abiertas, hay optimismo por ambas partes, pero las cantidades siguen sin cuadrar. Se esperaba llegar a un acuerdo en las últimas horas.