Los hermanos José (54 años) y Edurado González (58) jugaron juntos más de diez años en un histórico RC Valencia, que ganó la Liga de 1983. A ese título sumaron dos finales de la Copa, más de 600 partidos en División de Honor, y alcanzaron la internacionalidad con la selección española. Pero los hijos tiran y, a día de hoy, cada uno forma parte de la directiva del Tecnidex y del CAU. Ambos equipos se enfrentan (17 horas; Quatre Carreres), en el pistoletazo de salida de la nueva temporada.
José González empezó a jugar en el San Roque, con 8 años, y a los 17 años se fue al RC Valencia donde fue nombrado mejor jugador juvenil de València. A partir de ahí llegaron los éxitos y la selección. Ahora, además de ser el delegado del Femenino, carga en sus hombros con los veteranos de ambos clubes que juegan juntos.
«Será una jornada de club. Vamos a hacer un día de rugby, desde las categorías inferiores hasta los veteranos, y llenar Quatre Carreres», cuenta José González, «nuestro objetivo esta temporada es un poco continuación de esta, centrarnos en las escuelas, y en cuanto al derbi empezar ganando sería muy importante», añade.
Su hermano Eduardo empezó a jugar en la Academia Marjo, junto a Paco Soler, y a los 17 años ya debutó con el RC Valencia en División de Honor donde reclutó a filas a su hermano «que cuando llegó no podía aguantar ni medio campo corriendo, pero que luego fue un jugador muy importante. Estoy orgulloso de haber jugado muchos años con él», apunta.
Sobre los objetivos del club y el partido de esta tarde, señala que «hemos hecho una apuesta a nivel de entrenador para hacer un trabajo importante con el primer equipo y la cantera. Estamos ilusionados. En el derbi me gustaría que hubiera un comportamiento excepcional y vivir una jornada de rugby como toca».
La conversación gira hacia la evidente falta de apoyo institucional, pese a que cada día más niños juegan al rugby, la falta de instalaciones en la ciudad, y la opción de un equipo franquicia. «Cuatro o cinco clubes de una misma ciudad en la misma categoría es demasiado. Me gusta el tema de franquicia, un equipo arriba apoyado por las instituciones públicas, y luego los clubes como ahora», dice José. Su hermano, Eduardo coincide. La idea está sobre la mesa.
