A Julen Lopetegui, seleccionador nacional, presente ayer en el palco de Mestalla, le tocaría tomar apuntes hasta en los márgenes de su agenda, ante todos los argumentos que le ofrecieron los jugadores del Valencia, en una de las mayores demostraciones de autoridad que ha deparado esta Liga. Rodrigo Moreno ha sido el primero en abrir la puerta de la Roja. Una oportunidad que ha aprovechado prolongando su buen momento de juego con el Valencia. Aunque ayer se interrumpiera su racha de seis partidos viendo portería, el rendimiento del delantero hispano-brasileño fue muy completo.

Pero no es el único nombre que salta como candidato. José Luis Gayà ha reencontrado la regularidad en su juego y exhibe un nivel defensivo notable. Ayer, sometió a Jesús Navas a un marcaje espléndido y Lopetegui tiene un detallado conocimiento de su potencial, por el paso de Gayà por las divisiones inferiores de la selección. En la lista también está Dani Parejo, que ha sonado con insistencia en las últimas convocatorias. Ayer cumplió con su cometido, aunque le faltó algo de finura, con errores en algunas entregas y la quinta tarjeta.

Y, por último, hay que estar atentos a la evolución de Carlos Soler. El jugador tiene asumido que su lugar natural es la sub 21, con la que apenas acaba de debutar, y que la selección absoluta está plagada de gran competencia, pero el crecimiento de Soler aumenta tras cada partido. Criado como mediapunta, reciclado como mediocentro defensivo y perfilado como extremo por Marcelino, su partido ayer pareció el de un jugador de banda de toda la vida, con recortes y regates de toda condición. Con esa progresión, nada es impensable.

La cotización de Guedes y el récord de Zaza

Gonçalo Guedes fue el gran nombre de la noche. Sus dos goles y sus carreras vertiginosas recuerdan a la velocidad inalcanzable de «Piojo» López y Pedja Mijatovic. El debate sobre intentar negociar una opción de compra (por ahora inexistente) con el PSG, está abierto. Pero esa no es la única complejidad que amaga el futuro del luso. Su explosión, tan llamativa, en la Liga, su juventud y la influencia de su agente, Jorge Mendes, disparan su cotización y lo sitúan en la subasta de los más grandes de Europa. Un caladero prohibitivo para el Valencia, que debe disfrutar (y no es poco) del presente del jugador. Por otro lado, Simone Zaza volvió a marcar e iguala la racha de Mario Kempes con cinco partidos seguidos con gol de un extranjero en el club. El delantero de Metaponto fue ovacionado al hacérsele entrega del galardón como mejor jugador de la Liga en septiembre, ante los ojos de sus padres, Antonio y Caterina, y sustituido también entre honores. En 10 meses, el renacimiento deportivo del jugador ha sido paralelo a la del propio equipo.

Mestalla se frota los ojos y

recupera cánticos olvidados

Mestalla ha sobrevivido al desarraigo de dos pésimos años y disfruta de sensaciones que creía perdidas. El estado de felicidad de un estadio de nuevo casi lleno (ayer 44.307 espectadores) tiene el ingrediente añadido de un estallido goleador casi sin precedentes, de no ser por las eliminatorias europeas de Cúper o el fútbol de salón con Hiddink. La afición paladea el buen momento e, incluso, recuperó cánticos olvidados: «Esta és l´afició d´un València campió». Que no pare la música.