Carlos Soler no ha entrenado esta mañana con el Valencia, debido a las molestias que arrastra desde el encuentro contra el Getafe, cuando recibió una dura entrada en el tobillo del rival Ángel. El centrocampista, de 20 años, jugó infiltrado contra el Celta de Vigo, el pasado sábado en Mestalla, y tuvo que pedir el cambio mediada la segunda mitad al bajar el efecto de los corticoides y reproducírsele el dolor. Esta mañana estaba previsto que se le realizasen pruebas para valorar su estado.

Soler dio un paso al frente y jugó el encuentro ante las bajas que ya presentaba el equipo de Marcelino García Toral, por la ausencia en banda de Guedes. Aparte, se da la circunstancia de que Soler lleva acumulado un fuerte desgaste físico en esta temporada, con una titularidad indiscutible en Liga, con apariciones en la segunda mitad en la Copa del Rey y jugando completos los encuentros con la selección sub´21.