El Valencia todavía no ha fichado en propiedad a Gonçalo Guedes, pero está en proceso. Mestalla podría seguir disfrutando de su joven estrella, apodado «Ducati» por sus compañeros debido a esa velocidad de su juego y que ha encandilado a la grada como en las tardes del «Piojo» López. La clave está en Peter Lim y su amistad con el propietario del París Saint Germain, Nasser Al-Khelaïfi. El máximo accionista del Valencia se ha tomado la negociación casi como una cuestión personal, por un futbolista por el que siente predilección desde antes de que debutara en el primer equipo del Benfica y que, además, está representado por Jorge Mendes, amigo y socio del empresario singapurés. La negociación está viva, pero no cerrada. El prestigioso periódico L´Équipe publicaba ayer que los dos clubes habrían llegado a un acuerdo por un precio de 35 millones, lo que supone solo una verdad imcompleta.

Tal como pudo comprobar ayer Levante-EMV de fuentes directas de la operación, los 35 millones respondían a un acuerdo tácito inicial entre Lim y Al-Khelaïfi cuando se formalizó, a finales de agosto, una cesión que no incluía ninguna opción de compra firmada por contrato. Con esa cifra, el PSG se garantizaba recuperar la inversión por el joven extremo, de 20 años, por el que pagó 30 millones al Benfica, más un bonus de 7 millones, el pasado mes de enero. De esta manera, los parisinos se permitían avanzar en el ajuste del "juego limpio financiero", ante el recelo de la UEFA de haber incurrido en dopaje económico con las millonarias firmas de Neymar Junior y Kylian Mbappé, que suman entre los dos 400 millones.

No obstante, las perspectivas sobre Guedes han cambiado notablemente desde que aterrizara en Mestalla. La promesa portuguesa que no tenía minutos para Unai Emery, ha deslumbrado en sus tres primeros meses como valencianista y su cotización se ha disparado. El pacto entre Lim y Al-Khelaïfi no se ajusta al valor de mercado y el PSG, en vísperas de un verano mundialista, lógicamente no se contenta con restablecer su inversión inicial. En ese contexto están las conversaciones.

El desenlace depende de varios factores. Está la opinión del futbolista, proclive a prolongar su estancia en Mestalla a medio plazo. En el Valencia se siente importante, querido y respetado, con un rol de primer protagonista que no tiene garantizado en los grandes clubes del continente. Con 20 años ha probado lo contraproducente que es para su progresión desembarcar en una entidad con sobrepoblación de "cracks". Con la complicidad de ese visto bueno del futbolista, y el respaldo siempre persuasivo de Jorge Mendes, Lim se ha lanzado a la negociación.

¿Cómo se va a pagar?

La predisposición de las dos partes invita al optimismo, pero queda una gran incógnita por resolver. ¿Cómo podría pagar la propiedad de la ficha de un futbolista en arrolladora cotización? El momento financiero del Valencia no es holgado. El club debe generar 45 millones de beneficios a 30 de junio para cuadrar cuentas por lo que, ya de partida, y tal como reconoció el director general, Mateu Alemany, se hará imperativa la venta de jugadores. Además, el Valencia tiene pendientes otras opciones de compra sobre jugadores de los que se anhela su continuidad, como Geoffrey Kondogbia, tasado en 25 millones en el acuerdo con el Inter.

Por otro lado, Gonçalo Guedes llega en óptimas condiciones para jugar contra el Villarreal el sábado en Mestalla (16.15), según confirmó el segundo técnico, Rubén Uría: "Ya solo tiene un mínimo de dolor, pero está bien. Si llega mentalmente preparado jugará, porque físicamente está en condiciones", explicó Uría a VCFRadio.