Sobre una operación descansan muchas de las expectativas deportivas y económicas del Valencia de cara al próximo curso, en el que, salvo sorpresas, el club regresará a la Liga de Campeones. La entidad de Mestalla hacía cuentas con los 35 millones no negociables que el Inter de Milán iba a destinar para ejecutar la opción de compra de Joao Cancelo, cedido en esta temporada en el equipo de San Siro.
El traspaso se debe decidir antes del 31 de mayo y el lateral portugués ha encajado finalmente en los planes del técnico interista, Luciano Spalletti. Sin embargo, tal como informaba ayer Tuttosport, el club lombardo tendría dificultades para asumir el fichaje definitivo debido a los problemas para cuadrar las cuentas y el Fair Play Financiero. Una encrucijada similar en la que se encuentra el propio Valencia, que antes del 30 de junio debe generar 45 millones en beneficios.
Sin esos 35 millones, el Valencia vería afectados varios de sus planes de futuro. De primeras, debería poner en venta a algunos de sus futbolistas más cotizados para cuadrar el presupuesto y poder justificar fichajes que tiene en mente, como el de Geoffrey Kondogbia, del que se deben abonar 25 millones al Inter, también antes del 31 de mayo.
En el peor de los casos, el Valencia recuperaría a un jugador que está atravesando su mejor momento y que cumple con los gustos futbolísticos de Marcelino García Toral, que ya lo intentó recuperar en el pasado mercado de invierno, pero Spalleti evitó la posibilidad.
Evitar la marcha de Gayà
Uno de los jugadores más apetecibles para el resto de equipos es José Luis Gayà. La cláusula del lateral, imprescindible para Marcelino, es decreciente y en julio pasará de 40 a 30 millones. La voluntad del club es la de evitar su marcha.
