Fichajes a pares. Kevin Gameiro y Daniel Wass preparan las maletas para ser futbolista del Valencia CF la próxima semana. El acuerdo con el Atlético de Madrid está cerrado en algo más de 13 millones de euros fijos más variables, mientras que este fin de semana se resolverá con el Celta de Vigo la salida del polivalente centrocampista danés, de 29 años, en 6 millones de euros.

La convicción de Gameiro a ser entrenado por Marcelino García Toral ha sido clave para decantar la operación. El delantero francés ha aceptado una rebaja sustanciosa de su sueldo a cambio de un contrato largo, de tres temporadas, teniendo en cuenta su edad, 31 años. Pero, por encima de cualquier otra consideración, el fichaje de Gameiro hay que entenderlo como el movimiento clave del Valencia para perfilar la mentalidad del equipo de cara a la próxima temporada. Un equipo más agresivo, más veloz y más contragolpeador. Todas las virtudes que reúne el atacante francés, a las que se le deben sumar la experiencia de un jugador en la madurez de su carrera y, además, la motivación para volver a recuperar el protagonismo perdido a la sombra de los titularísimos Griezmann y Costa.

«El juego en transición del Liverpool es maravilloso. Gente arriba y abajo, es dinámico, pasan cosas. Quiero que mi equipo juegue así», reflexionaba Marcelino García Toral en Levante-EMV para dibujar el Valencia CF al que aspiraba en el año del Centenario. La llegada de Gameiro acerca al equipo a esa proyección. Se trata de un jugador explosivo, con un repertorio quizá escaso en variedad pero alto en efectividad. Un futbolista vertical y de últimos metros, con una habilidad táctica notable para combinar y girarse, para saber interpretar los movimientos de compañeros como Rodrigo Moreno, con quien se podrá asociar con mucha facilidad.

El pasado de Gameiro en categorías inferiores como extremo le permite tener mucha desenvolturaen para irrumpir con desmarques entre el lateral y central izquierdos. Una vocación de contragolpe que se multiplicará con el músculo con el que se está hormigonando el equipo en la medular y la defensa. Un frontón desde el cual disparar ataques vertiginosos.

El caso de Wass es distinto. Sin representar una prioridad para Marcelino, sí se le valora como una excelente oportunidad de mercado para reforzar el centro del campo al terminar contrato en 2019 y poder salir por un precio asequible. Hoy, en la presentación de Araujo, el director deportivo del Celta, Felipe Miñambres, reconoció que antes del lunes se podría cerrar el acuerdo. El Valencia ofrecía 5 millones y el Celta exigía 7, y todo apunta a que se cerrará en torno a los 6 millones. Wass quiere evitar reincorporarse el lunes a unos entrenamientos que, junto a Jonny y Radoja, que también desean irse, trabajarían al margen. De Wass el Valencia maneja informes que destacan su profesionalidad intachable y su polivalencia táctica, al poder jugador como organizador y en las bandas.