La sonrisa de Marcelino al acabar el encuentro expresaba la satisfacción casi plena. Había faltado acierto en el remate para abrochar el partido, pero sus jugadores había cumplido todo lo demás: juego en equipo, solidaridad, personalidad y atrevimiento en un escenario tan majestuoso como Old Traffor y ante un rival que le quintuplica el presupuesto. El eje del Valencia estuvo a la altura: dos centrales excelsos (Garay y Gabriel Paulista) y dos mediocentros muy solventes (Kondogbia y Parejo), además de la pelea constante deBatshuayi. El ataque corrió a cargo de Gayà y de Guedes.

El árbitro le perdonó una tarjeta de libro al lateral ecuatoriano Valencia por una entrada intimidatoria por detrás a Guedes, varios minutos dolorido, recuperándose de la tarascada. El árbitro libró de tres tarjetas a los jugadores del MU en la primera parte, las mismas que sí enseñó a los valencianistas. Pesó Old Trafford. El Valencia firmó un primer tiempo muy serio, con carácter para defender (excelente Gabriel Paulista en la marca a Lukaku) y valiente para atacar. El lento Parejo le robó un balón al atlético Pogba en la medular: los pájaros disparando contra las escopetas. El equipo de Marcelino percutió una y otra vez por su flanco izquierdo, aprovechando la insistencia de Guedes y de Gayà. La zaga de Mou tapó todos los envíos al centro: muchos pases de la muerte desperdiciados. El VCF había movido el balón con soltura, sumando pases de primera, haciendo correr a los 'reds'. Gayà estuvo pletórico, doblando a Guedes media docena de veces, destapando la debilidad defensiva de Antonio Valencia.

El Manchester, juego aéreo

El Manchester defendía con muchos efectivos y muy cerca de De Gea, todos en su propio campo. Su peligro llegó a balón parado y en el juego aéreo, buscando las cosquillas de un inseguro Piccini, el punto débil de Marcelino. Al final, aguantó el VCF y se marchó fortalecido de Old Trafford. El equipo de Marcelino crece cada jornada y el Manchester United está anclado en 2004, año en que se quedó varado el tacticismo de José Mourinho.