Sixto Casabona (Benagéber, 1962-València 2004) saltó del anonimato al estrellato al inicio de la temporada 1985-86, la temporada que desembocó en el descenso. Ascendido del filial por el entonces entrenador, Valdez, Sixto comenzó el curso como un ciclón: 2 goles al Valladolid y 3 al Celta en las dos primeras jornadas. Tardó 7 semanas en volver a marcar y, tras ser rebasado por Hugo Sánchez como «pichichi», recuperó el liderato de goleadores con dos tantos más ante el Racing y Zaragoza, eclipsando durante un tiempo a su compañero Wilmar Cabrera. Con 7 tantos, en lo alto de la tabla de anotadores, llamó la atención nacional, hasta el punto de que fue entrevistado por Matías Prats en Estudio Estadio, entonces el único referente de los resúmenes de los partidos, el 3 de noviembre de 1985, el mismo día de marcar al Zaragoza. Sixto, que no era un «9», sino un extremo derecho rápido, corpulento, habilidoso y con el don del gol, había ocupado la posición del lesionado Sánchez Torres. Su olfato goleador en el VCF se evaporó, pero disfrutó de su momento de gloria antes de tener más continuidad en el Elche, su destino.
