Los cinco meses de rumbo errático en LaLiga y la eliminación temprana en la Champions han retocado los objetivos del Valencia CF en la temporada del Centenario pero, sin embargo, no se han traducido en un descenso del valor de mercado de la primera plantilla blanquinegra. En julio de 2017, cuando el club se encontraba en un plácido momento saboreando el regreso a la Liga de Campeones tras una notable temporada, el valor acumulado de la plantilla era de 370,3 millones, según la estimación del observatorio futbolístico CIES. A 3 de enero, según el cálculo del prestigioso instituto suizo, en que se computan variables como el rendimiento, edad, proyección e impacto mediático, la primera plantilla se ha revalorizado en 73,6 millones añadidos, hasta llegar a los 444,9 millones de euros.
¿Cómo se explica que a pesar de los reveses de la primera mitad de temporada, la plantilla del Valencia se haya revalorizado y su tasación se acerque a los 500 millones? En primer lugar, el prestigio adquirido en la temporada pasada no se evapora tan fácilmente en un equipo que, pese a su irregularidad, ha perdido muy pocos encuentros: tres en LaLiga y dos en Liga de Campeones. Además, el rendimiento individual de varios jugadores se ha visto potenciado en un equipo cuyos males se han visto concentrados casi exclusivamente en la ausencia de puntería.
Dos son los casos más destacados: José Luis Gayà y Carlos Soler. En mitad de la tormenta, los dos canteranos han salido impulsados y han sostenido al equipo en los peores momentos. Ese compromiso y ese nivel han tenido un tenido un eco abrumador en su precio de mercado. Gayà, de 23 años pero uno de los veteranos por años de permanencia en el primer equipo, ha subido su valor en casi 24 millones. De los 18,6 millones de euros hasta los 42,5. El lateral de Pedreguer vive el mejor momento de su carrera y lo ha refrendado con la internacionalidad absoluta. Por otro lado, Carlos Soler, con 22 años recién cumplidos, sigue creciendo sin prisa, pero sin pausa. El centrocampista ha regresado al nivel futbolístico y físico previo a la lesión que hace un año lo mantuvo dos meses apartado y ha recuperado su relación privilegiada con el gol que le ha acompañado en toda su trayectoria. Concretamente fue el valencianista más determinante en la fase de grupos de la Liga de Campeones. Aunque el Valencia cayó eliminado, Soler coleccionó dos goles y tres asistencias. Es decir, tuvo una incidencia directa en cinco de los seis goles de su equipo. Es uno de los pilares fijos de la selección sub'21 y empieza a frecuentar las pre-listas de la absoluta. Con todo, el valor de mercado de Soler ha subido en 10 millones. De los 26,3 en los que estaba tasado en el mes de julio, a los 36,8 que marca en la primera semana de 2019.
Otro ejemplo es el de Neto Murara. El portero brasileño ha destacado en la mayoría de encuentros y sin duda es una de las razones de la baja cifra de goles encajados y de la firmeza defensiva consolidada por el equipo. Según CIES, el guardameta de Rio Negrinha, de 29 años, ha subido más de 8 millones su precio. De 15,1 millones a 23,4. Entre los futbolistas que están al alza también despunta Gabriel Paulista. Líder defensivo para Marcelino, el central brasileño de 28 años ha subido casi 7 millones su tasación: de 19,6 millones a 26,3. A pesar de las lesiones, el caché de Gonçalo Guedes no baja. De los 75,1 millones de julio, ha subido a los 81,4 que marca en la actualidad. De los fichajes adquiridos en propiedad, la nota es positiva. Sobre todo para Daniel Wass y Mouctar Diakhaby, que han aumentado en 7 y 4 millones, respectivamente. Contrataciones cuestionadas, como la de Cristiano Piccini, han subido su precio en tres millones hasta los 10,4.
Por supuesto, también hay jugadores que han bajado su promedio. En cualquier caso, no han sido descensos pronunciados. Son los casos de Garay y Parejo (menos de un millón en cada caso), Coquelin (que ha regresado de una larga lesión) o Kondogbia. El jugador centroafricano, marcado por las continuas lesiones y sin el reclamo de jugar el Mundial, marca la bajada más llamativa: de 40,1 millones a 35,5. Uno de los fiascos, indudables, es Gameiro, que baja a los 10 millones.
Ventas sin plantilla devaluada
En conclusión, el Valencia respira tranquilo de cara a un verano en el que, sin un bloque devaluado, tendrá que volver a realizar una gran venta, al estilo de la de Joao Cancelo, que marchó a la Juventus por 40,4 millones. El club tiene contemplado recaudar 42 millones en este apartado. Una necesidad que se podría incrementar si no hay Liga de Campeones, si no alcanza la previsión este año de 64,5 millones por competiciones o si explota alguna contingencia de pago, como la multa de Bruselas de 24 millones .
